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Shen Fanxing estaba en un sueño profundo, pero se despertó cuando Bo Jinchuan la levantó.
Una sensación de alerta cruzó por su mente, pero se relajó cuando vio a Bo Jinchuan.
—¿Ya terminaste?
—Sí.
Bo Jinchuan respondió en voz baja mientras bajaba la mirada a la cara somnolienta de Shen Fanxing. Sus largas pestañas aleteaban ligeramente y la expresión relajada en su rostro hizo que su corazón diera un vuelco.
No pudo evitarlo y bajó la cabeza para darle un beso en los labios.
—Sigue durmiendo.
—Está bien…
Shen Fanxing emitió un leve gruñido antes de rodear con sus brazos el cuello de Bo Jinchuan. Luego anidó su rostro contra su cuello.
Su cálida respiración era como una pluma acariciando su piel y tenía un tenue aroma persistente. Su postura transmitía delicadeza y su suavidad en su abrazo le dio a Bo Jinchuan una sensación de satisfacción.
Yu Song estaba esperando abajo en el coche. Se sorprendió un poco al ver a su maestro cargando a la mujer fuera del edificio.