La mirada de Fang Yuan se posó en la mujer frente a ella, su tono exudaba indiferencia —Parece que usted es quien muestra indiferencia hacia nuestra sede, señora He. He revisado su registro de asistencia. ¿Tiene alguna explicación?
—Dado que ya ha revisado mi registro de asistencia, debería saber que he sido diligente y puntual y nunca me he ido temprano durante el último año —replicó la señora He.
—Soy consistentemente la primera en llegar y la última en irme de la empresa —continuó.
—Todas mis contribuciones a la empresa están bien documentadas —añadió.
—Y aún así, terminaron mi empleo sin causa. ¿Cree que no llevaré este asunto a la sede, poniendo en peligro potencialmente su propia posición? —indagó la señora He, desafiante.