—No, no tengo derecho a mencionar a tu abuela. Si tu abuela despierta y ve que la familia Fang ha sido derrotada por mí, definitivamente se va a sentir desolada. En ese momento, su condición empeorará. Suspiro… —Fang Liguo parecía arrepentirse—. Es nuestra culpa. Es justo que nos odies. No esperamos ser perdonados por ti. Si estás dispuesta…
Antes de que pudiera terminar, Fang Yuan lo interrumpió:
—No, no estoy dispuesta.
Fang Liguo no anticipó su fuerte rechazo y se sintió desesperado:
—Yuanyuan, ¿qué puedo hacer para apaciguarte? Mientras pueda hacerlo…
—Por supuesto que puedes —afirmó Fang Yuan directamente—. Compensa con 60 millones de yuanes. Toma este dinero al mercado negro y compra unas pastillas para la abuela.
