—Song Ling, ¿cómo está tu salud? Escuché que te lastimaste el corazón, lo cual es bastante peligroso. ¿Debería usar mis conexiones para encontrar algunos médicos profesionales que te examinen? —preguntó Sheng Xin, acomodándose en la silla junto a la cama de Song Ling, su preocupación evidente en su voz.
—No es necesario. La cirugía fue realizada por el Doctor Legendario. Me estoy recuperando rápidamente y casi estoy curado —respondió Song Ling con el rostro inexpresivo.
Sheng Xin, sintiéndose deshonrada, mostró una expresión de disgusto.
—¿Cómo uno podría hablar así a una joven dama? —se preguntó Wang Lan, irritada por la franca honestidad de Song Ling, aunque verdadera.
—Xinxin, Song Ling te agradece en su corazón, es solo su naturaleza tímida lo que le impide expresarlo —interrumpió Wang Lan apresuradamente sin darle a Song Ling la oportunidad de replicar.