—No te preocupes, Daidai. Ya he comprobado cómo está Fu Nan. Su presencia en el escenario y su carisma están mejorando constantemente —aseguró Su Ting.
Gu Dai se sintió tranquilizada.
—Daidai, tengo buenas noticias para ti —dijo Su Ting con una sonrisa.
Al ver el misterioso comportamiento de Su Ting, Gu Dai preguntó con curiosidad:
—¿Qué noticias?
—He oído que el Simposio de Hackers UCMS va a tener lugar en los próximos días, y se va a realizar justo aquí en la capital —reveló Su Ting.
—¿UCMS? —repitió Gu Dai, sorprendida.
Ella estaba familiarizada con esta organización, un colectivo de los mejores hackers de varios países dedicados a mantener la estabilidad en el mundo cibernético. Sus habilidades eran incomparables.
—Daidai, ¿piensas asistir? —preguntó Su Ting con una sonrisa.
Desde que recuperó su memoria, Gu Dai había estado ocupada con los asuntos de la empresa. Pero ahora que las cosas se habían estabilizado, podía permitirse tomar un tiempo para el simposio.