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Los dos bebés estaban acostados uno al lado del otro. Cuando Jiang Yu los vio, estiró su pequeña mano y agarró los dedos de Tan Ming. Balbuceaba, como si estuviera insatisfecha de que su madre no la tocara primero cuando llegó a casa.
Cuando Li Mei vio esta escena, sonrió y bromeó con Jiang Yu, dándole un apodo. —Qué pequeña gángster. No soporta ser ignorada en absoluto. Incluso tiene que estar celosa de su hermano menor.
Las comisuras de los labios de Tan Ming se curvaron en una sonrisa suave. —Sus personalidades son realmente opuestas. La hermana mayor es como un chico, vivaz y ruidosa, mientras que el hermano menor es callado y reservado. Incluso cuando sonríe, lo hace de forma muy contenida. Las comisuras de sus labios se elevan ligeramente para hacernos saber que está feliz.
La mano de Tan Ming se movió en dirección a la pequeña mano de Jiang Yu.
