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Si Cheng miró la silueta de Tan Ming durante unos segundos. Cuando Zheng Wen vio esta escena, su rostro se puso aún más verde. Bajo la cobertura de su bolso, extendió la mano secretamente y tiró de la esquina de la camiseta de Si Cheng.
Si Cheng volvió en sí. Las expresiones de ambas familias no eran buenas.
Zheng Wen todavía tenía que sonreírle a la familia Bai. —Es una larga historia. Todo es por las supersticiones feudales de la abuela de Si Cheng. Si Cheng también es una víctima.
Zheng Wen contó la historia de cómo Si Cheng se volvió vegetativo después del accidente automovilístico, cuando la familia acordó que debería casarse con Tan Ming para cambiar su suerte. Después de algunas tergiversaciones de la historia, se convirtió en que la Abuela Si escuchó una superstición loca e insistió en que Si Cheng se casara con Tan Ming. Como hijos, no querían desobedecer a su madre, así que Si Cheng tuvo que casarse lamentablemente con una mujer que no le gustaba.
