Zhang Hua no esperaba que esta gente atacara como bandidos. Incluso los actores en los cables fueron derribados. Estaban a punto de desmantelar sus arreglos.
—Todos ustedes, paren. Esto pertenece a nuestro equipo de producción. No pueden tocarlo —dijo con ansiedad.
—Estas cosas sí pertenecen a tu equipo de producción, pero el lugar ahora es de nuestro equipo de producción. No necesitamos estas cosas, así que por supuesto que podemos desmontarlas —Jiang An sonrió y dijo.
Después de estar influenciada por Zou Bai durante tanto tiempo, se había vuelto dominante. Ya que podía resolver el problema de la manera más simple, no había necesidad de perder tiempo.
El profesor que la familia Jiang había contratado para enseñarle también le había enseñado esto. Después de todo, los negocios eran como un campo de batalla. No podía dudar en lo absoluto. Como la futura sucesora de la familia Jiang, estaba creciendo lentamente.
