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—Jiang An solo tenía pensado probar un poco de comida y reservar espacio en su estómago para cenar con Zou Bai a las cinco. Sin embargo, la cocina de Jiang Zhen hizo que se olvidara de ello y se concentrara en comer.
—No fue hasta que se llenó que recordó que tenía que guardar espacio en el estómago —se tocó la cabeza suavemente y frunció el ceño—. Mira mi memoria.
—Al ver esto, Jiang Zhen pensó que Jiang An se sentía mal. Se levantó rápidamente y se acercó —An'an, ¿te sientes mal de la cabeza?
—Jiang An se rió con sequedad —.No, no. Mi estómago se siente un poco incómodo. Creo que comí demasiado. ¿Tienes pastillas digestivas en casa?
—Jiang Zhen acababa de mudarse y aún no había preparado los medicamentos habituales —.No tengo medicinas, pero tengo té verde. Te haré una taza. También es bueno para la digestión.
