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Zou Ya entró desde el salón lateral y se detuvo junto al sofá. Gritó:
—Abuela.
Wen Li extendió la mano y atrajo a Zou Ya hacia su lado. Le enseñó a Zou Ya cómo reconocer a la gente.
—Xiao Ya, llama a abuela Li y a tía Jiang —le indicó.
Zou Ya enderezó su cuerpo y los saludó obedientemente. A tan corta edad, parecía más maduro que sus pares.
Jiang An sonrió y asintió en respuesta. Luego, examinó rápidamente a Zou Ya y se dio cuenta de que el pelo de Zou Ya era un poco castaño claro. Tenía ojos negros y rasgos faciales tridimensionales. Eran diferentes a los rasgos faciales exquisitos de la familia Zou. Tenía los rasgos más marcados.
Li Mei preguntó con curiosidad:
—Vaya, ¿de quién es este apuesto jovencito?
Wen Li sonrió y respondió:
—Es de mi primogénito. Cumplirá cinco años en unos meses.
Al escuchar esto, Li Mei no pudo evitar suspirar.
