La lluvia se hacia cada vez más y más intensa hasta transformarse en una gran tormenta con vientos que te harían volar si estuvieras en el mundo terrenal y gotas que te hacen sentir el mayor de los fríos, el paso por el puente hasta llegar a la ciudad era bastante largo aunque era muy intimidante y sombrío al mismo tiempo, notaría que una gran cantidad de almas y personas de todos lados del tiempo se harían presentes caminando por el puente.

-es increíble todo esto, nunca pensé ver algo así en mí muerte

Empezaría a caminar un poco rápido ya que las gotas que caen te helarían la sangre con el más mínimo contacto de esta. Pasaría horas, días, semanas en cruzar el puente hasta el otro lado en donde esta la entrada a la gran ciudad, desde a lo lejos se notaba que era algo sobrenatural las dimensiones de la necropolis de Hades, llegaría luego de un mes caminando sin parar aunque no se sentiría el cansancio, antes de entrar a la necropolis vería una gran cantidad de esqueletos fuertemente armados vigilando la entrada, al entrar en la ciudad vería con asombro lo espeluznantemente hermoso y sombrío que sería la arquitectura de los edificios, ya que eran de un estilo gótico, luego de eso recordaría la lluvia y sus gotas, caminaría hacia una taberna, al llegar vería por la ventana de esta que mí cuerpo había cambiado, mí cabello era largo y negro con diferentes líneas rojas, mí test blanca seguiría y portaría un atuendo que sería un sobretodo, este tendría unas hombreras de color negro con detalles dorados que serían triángulos dorados, también poseería botones que no se verían por lo negro del traje y alrededor de los botones los mismos detalles que con las hombreras, también portaría pantalones negros, algo que me di cuenta un poco tarde es que tendría gafas circulares, y mis ojos son de un color gris azulado, todo esto me había puesto a pensar el por qué de mí nueva apariencia, ¿sería acaso que Hades al ser un Dios tan elegante como me lo había mostrado este quiso que esté igual de formal que el para este tipos de cosas? Dejo de llenar mí cabeza de tantas preguntas que se me vendrían por mí nueva apariencia y entro a la taberna.

Al entrar lo único que definiría al bar, es, completamente asombroso, había una gran mesa en el centro con varias sillas que estarían ocupadas por criaturas y almas pasandosela bien, al ser un lugar muy grande este tendría muchas mesas a su alrededor también con varias personas, criaturas o almas nuevamente, sin más y echándole un vistazo a cada cosa de la taberna ya que no creo lo hermoso que es el lugar, llegaría a la barra de bebidas y me siento en una de las sillas que serían de color negro con rojo, a decir verdad me gustaba como quedaba por qué y como olvidaba mencionar el lugar era oscuro y con vista rojiza, al sentarme en la barra el cantinero que por sorpresa tendría de cabeza una calavera de un pez muerto y cuerpo de calavera también se acercaría a mí y con voz algo apagada me diría.

Cantinero: veo que es nuevo en la ciudad y que mantiene su cuerpo también, ¿Dígame, que desea que le sirva?

-Samssaro: mucho gusto, ehhh señor pez cantinero, me gustaría una cerveza si es que existe eso por aquí

Cantinero: si existe, tenemos varias cervezas de todas las épocas y lugares, la que le recomiendo es la Victro, es muy buena y su sabor se adapta al que la consuma dependiendo que le gustaría en ese momento. Cómo es nuevo le daré una completamente gratis, ¿señor?.. Disculpe ¿Cómo debería llamarlo?

Samssaro: oh muchas gracias, mí nombre es Samssaro, ¿Cómo es el de usted, mí cadavérico amigo?

Cantinero: mí nombre, pues la verdad nunca eh tenido un nombre, desde que morí después de ser pescado por uno de tu especie y venir aquí solo me eh preocupado por mí taberna, ¿como le gustaría que me llamara?

Samssaro: te llamaré señor Picis , lo siento, no tengo gran imaginación para los nombres jaja

Cantinero señor Picis: no se preocupe, señor Samssaro

El cantinero se agacharía y se escucharía cómo abre una puerta en donde se ve una luz blanca desde afuera y al volver a dónde estaba yo tendría en sus manos la botella de vidrio de la cerveza y la abriría poco después para dármela

Cantinero señor Picis: Disfrute su cerveza y bienvenido a la necropolis del señor Hades

Samssaro: muchísimas gracias, señor Picis

Agarro la cerveza que estaba fría y la levanto en señal de saludo al cantinero que fue muy amable conmigo, le doy un sorbo y al terminar sonrio muy feliz ya que tome la mejor cerveza que abría bebido en mí vida y muerte, me apoyo en la barra aún con mí cerveza y miro todo el lugar ya un poco relajado y como si una chispa se encendiera, recordaría que tendría que encontrar y asesinar al sujeto que le estaría robando las almas al señor Hades, igualmente descansaria un poco, después de todo lo que había pasado y miraría la botella de cerveza con una sonrisa en mí rostro, de reojo noto como alguien se sienta al lado mío.

Desconocido: Cantinero, un poco de alcohol por favor, el que sea

Cantinero Señor Picis: de acuerdo, capitan

Al ver a la persona que estaba hablando con el cantinero veo que es una mujer, está tendría una camisa blanca junto a una corbata negra, en sus brazos tendría una especie de guantes con armaduras y estos poseían una especie de pequeñas plumas metálicas de color negro y dorado, después de ver su vestimenta notaría que su cabello sería negro casi al igual que el mío y sus ojos eran de un gris casi blanco. El cantinero le serviría una bebida rosada junto a una cereza en la copa, está se lo tomaría poco a poco hasta que noto que la estaría viendo.

Desconocida: disculpe, ¿se le ofrece algo?

Samssaro: no se me ofrece nada, solo que soy nuevo en esta ciudad y todo esto es muy nuevo para mí

Desconocida: Bueno, si deseas algo solo dime, Samssaro

Samssaro: veo que conoces mí nombre ya, como debería dirigirme a usted, señorita

Desconocida: puedes llamarme capitán, por ahora no te diré mí nombre, no llegamos a tanta confianza

Diría para luego ver cómo terminaría con el trago que había pedido, está tomaría la cereza que tendría en la copa y se la metería en la boca.

Capitán: bueno Samssaro, nos vemos luego y disfruta de la ciudad

Samssaro: muchas gracias, capitán

Digo mientras la veo como se marcha, automáticamente sigo bebiendo un poco más cuando noto que alguien me mira, hago como que busco algo en mí bolsillo y veo como la capitana me mira un solo segundo para irse luego y salir por la puerta de la taberna.

Termino mí botella de cerveza la cual disfrute muchísimo por el sabor que había dejado en mí boca.

Samssaro: bueno me toca irme ya, ¿Hasta que hora está abierto la taberna, mí calaverico pescado?

Cantinero señor Picis: la taberna está abierta siempre

Samssaro: gracias por la información, vendré pronto la próxima vez

Al decir eso dejaría la botella en la taberna y el cantinero la guardaría, me iría de allí y al salir veo que la lluvia seguia cayendo.

Pondría mis manos en los bolsillos de mí sobretodo y empiezo a caminar a paso lento por toda la ciudad, trataría de evitar la lluvia cuando veo que las únicas cosas que estarían bajo la lluvia serían las almas que no les afectaría la lluvia ya que las gotas pasarían de largo sobre sus cuerpos intangibles, doy una sonrisa y sigo caminando, a lo lejos veo un edificio con un reloj bastante grande, lo vería y caminaría hacia allí, luego de un tiempo caminando y con la lluvia aún en su apogeo veo un cartel en una pared tan negra como la noche, este tendría una cara, ese rostro se me hace familiar y recordaría que es el asesino que estaba buscando, este tendría una gran recompensa, río un poco y digo.

Samssaro: al parecer no soy el único que lo está buscando

Sigo mí camino, y después de un buen rato caminando y al ver casi el reloj en frente de mí escucharía una voz que vendría desde lo profundo de un callejón en donde yo estaría enfrente, era la voz de una joven que pedía ayuda, al parecer era el único que lograba oir las palabras que me diría "ayudame" esa persona la cual estaba escuchando, iría de inmediato hacia el centro en donde estaría la persona la cual me estaría llamando, empezaría a correr a gran velocidad ya que los gritos se escucharían más y más desesperados pero algo raro notaría mientras corría, notaría una presencia que me estaría viendo de cerca pero no sabría identificar que o quien era así que no le daría tanta importancia y seguiría con lo mio. Al llegar a la ubicación notaría que era una plaza abandonada, con poca luz y mucha basura en ella, luego de ver la zona notaría que abría una figura de un hombre muy grande y alto, este tendría a la chica sostenida del cuello, lo miraría un poco asustado y cuando nota mí presencia le vería el rostro, era el hombre que estaba buscando.

Samssaro: así que tu eres al que estoy buscando, bien quédate quieto así me resulta más fácil acabar contigo

Asesino: ¿Sabes cuantos cazadores de almas han venido contra mí y ninguno a vuelto con vida? Al parecer serás otro más del montón

Samssaro: no sé que sea eso de los cazadores de almas pero lo único que debo hacer es matarte y llevar tu alma con el señor Hades.

Digo para acto seguido ver cómo varios guardias esqueletos de la ciudad aparecen y alumbran al hombre, al parecer me habían seguido y dieron con la ubicación del asesino, este sonreiria con locura y al dejar que los esqueletos se acerquen para matarlo este sacaría unos guantes, se los colocaría y chocaría sus puños para luego ver cómo de este choque se generaría una electricidad enorme y sentiría como me estaría atrayendo hacia el, los guardias se abalanzarían contra el hombre y de unos puñetazos los esqueletos quedarían en el polvo.

Asesino: uno solo de estos guardias equivalen a mil soldados mortales, para mí son solamente basura

Dijo mientras lo miraría con asombro y terror al mismo tiempo, una de las hachas que tendría un esqueleto caería enfrente de mí, rápidamente la tomaría y escucharía a los guardias decir que necesitarían refuerzos.

Guardias: llamen a los cazadores de almas, no podemos solos contra el número 13

Samssaro: ¿Número, 13?

No entenderia bien lo que querría decir el esqueleto y caminaría lentamente pero con paso firme hacia el asesino, con hacha en mano miraría como el asesino empezaría a caminar en dirección hacia mí para luego empezar a correr, haría lo mismo que el y al estar lo suficientemente cerca daría un salto y le intentaría clavar mí hacha en la cabeza de el, para desgracia mía el bloqueo el ataque con su guante y con la otra me mandaría a volar, al caer al suelo me doy un fuerte golpe por el impacto al chocar contra el suelo

Asesino: te falta experiencia, novato, parece que a Hades solo le quedan como cazadores unos inútil-

No terminaría de decir esas palabras cuando veo que una persona estaría enfrente de mí, me levanto y noto que el asesino estaría algo asustado y muy nervioso, veo bien a la persona y era la capitán, está estaría igual que en la taberna solo que sus guantes de armadura tendrian cuchillas en donde deberían estar las pequeñas plumas.

Capitan: Ya basta, número 13, rindete ahora o muere junto a tu locura

Número 13: así que la capitan, rango número 2 está aquí, será divertido matarte y disfrutar de tu caída ante mí

Ella no diría nada más y antes de que numero 13 se diera cuenta este ya estaría en el suelo con una gran cortada en la garganta, ¿se había movido a una gran velocidad? ¿Quien era esta chica en realidad? Esas serían mis preguntas cuando escucharía la voz de ella.

Capitan: ya te acabo de proteger, ahora acaba con su vida

Sentenció ella, me dirigiría hacia el asesino y este solamente estaría diciendo que no lo matará, que le dieran otra oportunidad, que no negociaría más con los demás reyes del inframundo, pero nada de eso le importaría a la capitán

Capitan: mátalo ahora y obtén tu recompensa o la tendré yo Samssaro

Samssaro: ya voy, jefa

Diría en tono burlón y al estar enfrente de el tomaría un hacha que estaría cerca, la sujetaría bien y me agacharía para clavársela en la cabeza, al instante el número 13 desaparece y en su lugar aparecería una moneda de color negro con detalles dorados y una calavera en el centro de color plateado, también se quedarían los guantes.

Me levantaria sin antes tomar la moneda y ponerme los guantes luego me dirigiría hacia la capitan.

Samssaro: muchas gracias capitán, si no fuera por usted no sabría que destino me tocaría si muriera nuevamente

Capitana: eso es fácil, solamente te volverías polvo y tu alma se extinguiria

Dijo, y al mirarla más de cerca notaría que tendría una especie de máscara en su rostro que le taparía sus ojos, rápidamente ella me dijo.

Capitana: Samssaro, aún te falta mucho por aprender a pelear en el inframundo, ven conmigo, conviértete en un cazador de almas

Asentiría y ella sonreiría, se quitaría la máscara que tendría cubriendo sus ojos y me tocaría el hombro para acto seguido empezar a ver todo a máxima velocidad, nos estábamos moviendo a una velocidad nunca antes vista, ¿velocidad luz? No tengo idea pero al detenernos me sentía muy mariado ante el viaje, ella reiría un poco y diría.

Capitana: Bienvenido a la base de los cazadores de almas, Samssaro

Dijo y al recomponerme miraría hacia todos lados , habría varias criaturas entrenando y organizando la base, sentiría un golpe en la cabeza y era ella con una sonrisa

Capitana: es por acá, el equipo está aquí, ya les informe que vendrías y quieren verte

Asentiria y empezaría a caminar hacia el interior de la base, mientras vería el cielo, aún llovía y un gran torbellino en el cielo se concentraba arriba de la base, como si algo totalmente peligroso estaría allí, igualmente seguiría caminando detrás de la capitán y estaría ansioso por ver quién sería mis próximos compañeros.