Ethan nunca había sido una persona particularmente afortunada. Entre sus notas mediocres y su trabajo a medio tiempo en una tienda de videojuegos, su vida transcurría sin mayores sobresaltos. Sin embargo, todo cambió el día que recibió un paquete misterioso.
Era un sábado por la mañana, y el sol apenas asomaba por el horizonte. Ethan, aún en pijama, bajó a recoger el periódico cuando notó una caja en su puerta. No esperaba ninguna entrega, y su nombre estaba escrito con una caligrafía antigua, casi arcaica.
Curioso, llevó el paquete a su habitación y lo abrió con cuidado. Dentro encontró un traje impresionante, elaborado con un material que nunca había visto antes. Era una mezcla de cuero y metal, con runas brillantes inscritas en cada parte. Había también una nota, escrita en un idioma que apenas comprendía.
"Solo el elegido del Vértice Arcano podrá desbloquear el poder de este traje y restaurar el equilibrio."
Intrigado y sin pensar demasiado en las consecuencias, Ethan se puso el traje. En el instante en que lo ajustó a su cuerpo, una luz cegadora llenó la habitación. Sintió como si su cuerpo se desintegrara y volviera a formarse al mismo tiempo.
Cuando la luz se desvaneció, Ethan se encontró en un lugar completamente diferente. Estaba en un denso bosque, rodeado de árboles altísimos y un cielo de colores irreales. El aire estaba cargado de una energía extraña, casi tangible. Este era el Bosque de Eldoria, un lugar antiguo y místico, lleno de secretos y peligros. Era conocido por ser el hogar de criaturas mágicas y por sus árboles que alcanzaban el cielo, con hojas que brillaban en una gama de colores que variaban con la hora del día.
Desorientado, Ethan dio unos pasos adelante. Cada movimiento se sentía más ligero y ágil. Miró sus manos y notó que las runas del traje brillaban intensamente. De repente, una figura salió de entre los árboles.
Era un hombre mayor, con una túnica adornada con símbolos similares a los del traje. "Bienvenido, elegido del Vértice Arcano," dijo con una voz profunda y resonante. "Mi nombre es Orin, y soy el guardián de este mundo, Elaria. Tú has sido traído aquí por el traje, que posee el poder de cambiar el destino de nuestra tierra."
Antes de que Ethan pudiera procesar lo que estaba escuchando, un rugido ensordecedor resonó en el bosque. Criaturas grotescas, mitad bestia mitad humano, emergieron de la maleza. Sin saber exactamente cómo, Ethan sintió que el traje respondía a su voluntad. Alzó una mano y un relámpago de energía salió disparado, desintegrando a una de las criaturas al instante.
Orin sonrió con aprobación. "Debes aprender a dominar los poderes del traje. Nuestra tierra está en peligro, y solo tú puedes salvarla."
Confuso pero decidido, Ethan asintió. Sabía que su vida había cambiado para siempre. Este mundo, con sus peligros y misterios, necesitaba un héroe. Y aunque no se sentía preparado, el traje le daba la confianza que nunca había tenido. Con Orin como guía, se preparó para enfrentar los desafíos que le aguardaban en el Vértice Arcano.