Con Emi y Aki fuimos a ver el departamento para planear todo para la mudanza en dos días.
Emi nos tenia expectantes, el departamento se encontraba en el cuarto piso, me llamo la atención que se veía unos de esos departamentos para gente con dinero, el acceso tenia puertas de vidrio que se abrían automáticamente al acercarse, en el recibidor habia un hombre de edad que tenia un rostro amable llamado Sergio Amawa, que era uno de los recepcionistas del apartamento, el señor nos saludo muy amablemente, reconoció a Emi lo cual ella le entrego una carpeta y le explico que ahora era la dueña de apartamento 469.
Muy amablemente el señor Sergio nos dejo pasar y nos dio la bienvenida, lo unico que nos pidió es que mandáramos a recepción quienes iban a ser las personas que iba a vivir ahí, y nos explicaron las reglas, de que no se podían tener mascotas grandes, pero si se permitían perros de raza pequeña y gatos, no se permitían fiestas después de las 1 de la mañana, y nos dijo más cosas de convivencia que se debían respetar.
-Bueno chicos llegamos aqui es, abriré la puerta y veamos nuestro nuevo hogar.
-Vamos abre ya Emi. - Dijo Aki entusiastamente.
-Ya voy fantasmita, mira que saliste impaciente.
-No la culpes nos llevas emocionando con esto ya un tiempo hermana.
Emi sonrió pícaramente.
-Lo sé, bien entremos.
Lo primero fue sorprendente, era muy grande la sala de entrada tenia un buen espacio para dejar zapatos, con muebles escondidos para dejar parcas o lo que quieras.
La sala era gigantesca, era todo un solo ambiente donde se veía, la cocina, living y comedor.
-¿Emi, cuanto mide el apartamento?
-Mide 80 metros cuadrado, si lo se, antes que lo diga es enorme, la primera ves que lo visite cuando vine a pedido de Gonzalo también me sorprendí, de hecho pense que era narcotraficante cuando vie esto... supongo que eso hubiera sido mejor que lo que termino siendo.
-¿Lo extrañas no es así Emi? - pregunto Aki adelantándose a mi.
-Si un poco la verdad, pero no es tiempo de lamentos, hay que darle las gracias...
Emi se quedo viendo unas fotos que habian en la entrada, era un portafotos con varias de ella, en medio una de Matsuo con su hermana, otra de su hermana sola, otra de Kyo con Matsuo cosa que me llamo la atención y una ultima con donde estaban sentados en el sillón Matsuo, Emi y Nikota encima de los dos.
-¿Quieres dejarlas ahí?
A Emi le salía un pequeña lagrima por uno de sus ojos,
-Podríamos poner fotos nuestras alrededor también.
-Si Hikaru, me gustaria mucho eso.
Emi me zamarreo un poco el pelo, lo que la hizo feliz.
-Ya ni me molesto en arreglarme el cabello entro tú y Aki pasan desordenándomelo.
-Te ves mucho mejor así Hika.
-Gracias cariño.
Me acerque a besarla, pero la atravesé, habia olvidado que el collar lo tenia puesto Emi.
-Ten te paso el collar para que puedas...
-No es necesario Emi, después aprovecharemos con Hika de estar juntos solos, al menos se que ahora puedo hacerlo.
-Aki tiene razón tenemos todo el tiempo del mundo... bueno no todo gracias a que ahora hay que encontrar tu cuerpo para que no te cueste tanto entrar en el nuevamente.
-No pensemos en eso por ahora, quiero disfrutar de esto con ustedes, Hika, vamos quiero ver nuestra pieza, y la que ocupara Emi también.
-De que hablas Aki, hay piezas para cada uno, no puedo dejarlos dormir juntos, aun son adolescentes, que clase de hermana mayor seria si les permitiera que pasaran las noches juntos.
-Emi acaso es una broma, pero si con Aki ya hemos dormido todos estos días juntos y incluso ya hemos hecho un par de cosas... que tu sabes.
Emi se reía, incluso se agarraba el estomago para retener su risa.
-Deberían haber visto sus caras, mira el rostro de Akari, Hikaru es como si hubiera visto un fantasma.
De hecho Emi tenia razón la más afectada con la broma fue Akari lo que me gusto que ella también se oponía a la idea.
-Tranquilos solo bromeaba, claro que los dejare tranquilos, solo cuídense de no tener bebes antes de tiempo... aunque no creo que puedas embarazarla en ese estado.
-Puedes dejar de decir cosas vergonzosas Emilia.
Akari le daba pequeños golpecito en la espalda a Emi, cosa que la hacían parecer una lindura.
Emi nos dio un pequeño tour por la casa, la cocina estaba bien equipada, tenia horno eléctrico y cocina que funcionaba a gas como eléctrica, tenia una lavavajillas y una amplia zona para lobar la losa cosa que se agradecía, además de un hervidor grande.
La pieza de Emi era gigante, de hecho era el doble de la que tenia en casa, y eso era decir mucho porque su pieza anterior era grande, pero ahora hasta le cabía un sillón un escritorio, y muchas cosas más en realidad.
Después nos llevo a nuestra pieza, que era casi tan grande como la de Emi.
-Esto es gigante.
-Si pense que aqui podrían estar los dos, además hay espacio suficiente para las cosas que quiera tener Aki.
-Eso me gustaria mucho, gracias Emi.
-Encargue una cama de dos plazas para ustedes, así estarán más cómodos, pense en comprarles una tv, pero se me ocurrió otra cosa que talvez les guste más, llegaran el mismo día de la mudanza.
-Me acerque a Emi para abrazarla, cosa que Aki también hizo.
-¿Un momento, adonde lleva esa puerta Emi?
-Ábrela y veras Hikaru.
Con Aki nos acercamos, abrimos la puerta que daba a un baño conectada a la pieza, un baño privado, con ducha, lavatorio y baño inteligente.
-Esto es genial, en verdad, ya no se que decir.
-Solo nos queda agradecer a Gonzalo... Hikaru.
-No puedo creer que me hagas decir esto, pero... gracias profesor Matsuo... No es necesario que lo digas tú Aki.
-Te tomare la palabra Hika.
-A todo esto mi pieza también tiene baño privado y la puerta que hay al fondo es una baño de visita, hay un tercer cuarto mas pequeño, pensaba arreglarlo para cuando Nikota se quede, si es que convenzo a sus abuelos, aun no he conversado con ellos, y solo he visto a Nikota una sola vez después del funeral.
-Porque no vas mañana a hablar con ella y la invitas al templo Emi.
-Eso es una buena idea, pero ahora hay que ordenar, saquemos todas las cosas de Matsuo y dejémoslas en el living, después les preguntare a Nikota que quiere conservar y que no el resto creo que será mejor entregárselo a sus abuelos, así que comencemos.
-¿A donde vas usted señorita?
-A ordenar, ¿por qué el tonito Hikaru?
-A ordenar mis pelotas, tu descansa no puedes ni agitarte ni hacer fuerza, hasta que tu brazo se recupere, eso es en 6 putos meses.
-Déjame a mi a Aki nosotros moveremos todos, ¿cierto?
-Claro, no hay problema con ello, déjanos a nosotros Emi, tu descansa en tú sillón.
Así nos llevamos lo que quedaba del día con Aki y yo moviendo todas las cosas al living de las pertenencias de Matsuo cosa que poca no eran. Fue gracioso ver a Aki debes en cuando ver como se le caían las cosas, fueron pocos, pero se frustraba, aunque a mejorado mucho con el control de su cuerpo, a tenido que esforzarse mucho durante este tiempo, y yo sigo siendo el mismo debilucho de siempre, tengo que volverme fuerte, pero ¿como?
-¿Hikaru, Aki nos pido sushi fresco?
-A mi no me preguntes ni que pudiera comer, eso lo extraño.
-A pero muy bien que te comes la boca de mi hermano y sin quejarte pervertida.
Aki se puso roja en el acto, empezó a decirle cosas que por lo avergonzada no se le entendía.
-Eso no era necesario Emi.
-Ya, ya, no aguantan ni una bromita, ¿pido sushi o no?
-Si, pide unos con queso crema, cibullet palta y Salmon para mi.
-Si de acuerdo.
Seguimos llevando cosa hasta dejar el living casi inhabitable, estuvimos todo el santo día despejando y arreglando las cosas para que estuviera listo para la mudanza, estaba agotado, mientras Emi soltaba una que otra broma, en concreto la habia agarrado con Aki para molestarla.
-Siempre es así.
-Sip, como no podía verte no te molestaba, pero ahora que puede anda acostumbrándote, y eso que todavía no parte con las bromas sexuales.
-Y por muchos que te hacías el ofendido, se que te gustaban Hikaru.
Ni siquiera podía contradecirle, porque tenia razón.
-Tu y Asuna son los culpables que me avergüence tanto, tu con tus bromas y por paciente casi sin ropa por la casa.
-Eso es raro en realidad uno pensaría con el tiempo te acostumbrarías a situaciones así.
-Emi tú no tienes un amigo que te delata a cada segundo que estoy en una situación donde una mujer esta desnuda o semidesnuda, bueno se te marcan los pezones, pero no es tan notorio como lo mío.
Emi inmediatamente se tapo el pecho con los brazos.
-Desde cuando... ni siquiera me habia dado cuenta de eso, dime esas malditas cosas, que no me doy cuenta, idiota.
Tocaron el timbre de que el sushi llego así que baje a recibirlo.