Año 470 de la era del dios vivo.
Viajar entre pueblos resultaba ser algo peligroso,independiente del estatus social.
Cualquier hombre por su sola naturaleza mortal se arriesgaba a los peligros del camino, ya sea bestias, otros hombres o....sin importar que,el peligro era latente.
Para todo ser que vive esta era la norma, excepto por algunos para quienes la muerte era difícil de alcanzar.
...
El olor a sal inundaba el ambiente, todo ocurria en medió de la costa,y ambos ejércitos se enfrentaron entre si.
Mi espada choco contra la del hombre frente mio,golpe tras golpe, asta lograr una apertura y apuñalar la garganta de mi adversario.
Tan pronto cayo al piso no tuve tiempo de relajarme,otra persona me ataco,bloquie su golpe con mi espada.
Por un momento olvidé que estaba en medió de una batalla de dos ejércitos,donde yo solo era uno de muchos.
Tras el intercambio de golpes mate a mi oponente.
-¡HABRÁN FUEGO!-ordeno una voz desde las colinas de la costa.
Al escucharlo,tome un escudo de los invasores,y me cubri con el ,las flechas llovieron desde lo alto sobre nosotros.
Me gire para ver a los arqueros, y tras ellos a nuestros superiores y nuestro rey.
Reconozco su rostro, lo seguí por años desde antes de aprender a manejar una espada.
"¿Porque estaba aqui?"pense,esta batalla fue hace mucho.
...
La luz del sol de la madrugada se filtro entre las nubes a la entrada de la galera,los pasajeros que hiban en ella que aún dormían, sintieron la luz calar en sus párpados.
De los pasajeros la mayoría estaban lejos del destino por el cual pagaron,solo uno abrió levemente los ojos.
Un pequeño resplandor rojo se asomo de entre sus párpados,la luz del sol le fue una molestia.
–fue un sueño.–dije ,empezando por despertarme.
Observe a las personas en la carreta.
Contándome éramos 6 1/2.
Tomo el mango de mi espada,y la bolsa en la que llebava mis posesiones,entonces me dispuse a levantarme.
No habia subido buscando ir a un destino especifico, solo quería abanzar lo más posible al este de mirabilia.
Observe el contenido de mi bolsa.
–Parece que todo está en su lugar.– dije, para inmediatamente dirigirme a la salida hubicada en la parte trasera de la galera.
–disculpe señor.– dijo una pequeña voz, la cual provenía de los acientos hubicados al frente mio.
–¿eh?– me volteó y mire a una niña de 9 años,sentada en el regaso de una mujer de entre 60 o 70 años.
–¿es usted un noble?–dijo,con una expresión inocente en su rostro.
–¿por qué preguntas?–dije,a lo que la niña señaló la espada que aún sujetaba.
–¿Esto?,es una vieja reliquia.–diria, y de un salto sali del carruaje.
la niña se levantó y se acerco al borde para no perderle de vista.
–¿pero entonces, usted..?–
–que insistente.–diria en voz baja,a su vez que retire la capucha de mi capa,y retire la bufanda de mi rostro.
...
La niña se quedó viéndo, aún parada en el borde, asta que escuchó la voz de su abuela.
–pequeña, no te acerques al borde.– con un tono somnoliento,la anciana llamó a la niña de regreso con ella.
–ven de regreso.–dijo,indicandole con un ademan que regresara.
–¡abuela, creó que aquel joven era un noble!–la niña se dirigió animada para contarle a su abuela.
–¿Aquel hombre? Ja,ha,no mi niña, los nobles jamás viajarian con gente como nosotros.–dijo la anciana entre risas.
–¿Pero...no se parecía a un plebeyo?–
–Es eso?hmmm,supongo que no son comunes, pero no por tener una cara bonita significa ser de la nobleza,yo misma tuve un rostro muy lindo en mi juventud ja,ja,ja.–dijo la mujer, volviendo a reirse.
–Abuela eso no es gracioso.– dijo la niña,haciendo un puchero ante la risa de la anciana.
...
El viajero que habia dejado el carruaje retiró tanto su bufanda como su capucha.
Un hombre en sus 20s,de estatura promedio, cabello negro y largo en la parte posterior de su cabeza
Pero lo más característico eran sus ojos,ojos con un iris rojo intenso.
Dejando de ver el carruaje,respiro profundamente por la nariz.
–A si que ahi es.–dijo,aviendose percatado de algo, empezo a caminar por la orilla del camino de tierra.
Duro asi un momento asta llegar a una vifurcacion.
Tomo el desvio,no paso mucho asta que dislumbro un pueblo pequeño.
–veamos cuanto provecho sacamos.–dijo,encaminandose en dirección al poblado.
...
Pueblo de ladon.
Tan pronto ingrese al pueblo,algunas personas,mas no todas, se fijaron en mi,tenia algunas ideas de a que se debio esto,pero aquel comentario de la niña paso por su mente.
"bueno,no es como si un sable sin hornamentos atraiga la atencion de ladrones."penso para si mismo,descartando aquella idea. "bueno,una pregunta tonta,la verdad solo hay dos razones,lo primero es mi apariencia,y lo segundo es..."
Miro rapida mente las expreciones de la gente.
–aqui no les gustan los extraños.– de ser lo primero o lo segundo,no me preocupaba,igual no seria la primera vez,pero no quitaba que era molesto.
Se detuvo,a su izquierda vio un establecimiento con un letrero que decia,posada.
–bueno,no aria daño descansar un poco.– habrio la puerta frontal,el recividor estaba oscuro,apenas iluminado por la poca luz filtrada por las ventanas, en una mañana nublada.
El encargado tras el escritorio rapidamente se percato de mi llegada. Era un hombre de baja estatura,de ropa gastada y con falta de cabello en la parte superior de su cabeza.
–ah,¡sea bien venido señor!–saliendo de detras de su escritorio,se apresuro asta estar frente a mi.
–¿es el dueño?–dije,preguntando al hombre frente a mi.
–¡si!,tenemos afortunadamente una habitacion disponible,un lenar de plata por noche.–diria el dueño,con voz nerviosa.
–permitame mostrarle.–
Dijo el dueño, hizo una reverencia educada,y con su mano izquierda señalo el camino.
Lo seguí subiendo las escaleras,girando a la derecha, asta una puerta al final del pasillo.
–Los baños estan abajo,si nececita algo digame,si gusta algo de comer se le llevarán directo a su habitacion,sera otro lenar por la comida.–dijo el posadero,habriendo la puerta para despues llevarse una sorpresa.
–¡Marlen!,¿que haces aqui?– en la habitacion habia una niña con erramientas de limpieza,llebava un delantal blanco sobre su vestido,la misma llebava un gorro del cual salia por los bordes su cabello castaño,no tendria mas de 12 años.
–mama me dijo que limpiara las habitaciones desocupadas.– dijo Marlen, ajitando el plumero indicando lo que hacia
–ah bueno,pero ahora tenemos un cliente.–dijo en tono calmado,instando a la niña salir del cuarto.
–bien,ya termine de todos modos.– la niña salio de la habitacion,also la vista al nuevo huesped.
Su atencion se sentro en el por barios segundos
–Marlen,no molestes al señor.–dijo,llamandole la atencion a la niña quien dejo de verlo.
–perdonela señor,mi hija no trata seguido con los inquilinos.– el posadero ofrecio sus disculpas,y me insto a pasar.
Cuando entre a la habitacion,vi una habitacion simple,con una cama en medio,un escritorio,y algunos muebles atipicos.
–por cierto, y casi lo olvido,cuando nececite algo pregunte por mi,soy Dorvish.–dijo Dorvish, presentándose formalmente.
–bien.– dije al escuchar el nombre del posadero. –mi nombre es Glad.–dije en respuesta al posadero ,ahora presentándose el,despues le entregarias 5 monedas de plata como adelanto.
–tal vez si quiera desayunar ahora, lo que sea estara bien. –dije,a lo que dorvish asintió.
asi el dueño de la posada y su hija dejaron la habitacion,cerre la puerta y me sente en la cama.
...
Aun en el pasillo,el dueño se dispuso a regresar al resividor.
–papa,ese hombre ¿en verdad se quedara?–le pregunto la niña.
–hija,no seas grosera ¿por que no deberi...,? –antes de terminar la niña lo interrumpe.
–¡no papa! No es por ser grosera,es solo que...ese señor parece tener mucha clase,tal vez sea noble, ¿estara comodo con su habitacion?–diria la niña en tono serio,lo que impreciono a su padre.
–¡Ja,ja,ja,ja,ja!–dorvish empezó reírse por lo dicho por la niña.
–¡no te rias papa!,voy muy en serio.–dijo en tono irritado ante la risa de su padre.
–perdon,es que me sorprende este repentino interes,jamas te habias preocupado por eso.–dijo Dorvish,tratando de calmar su risa.
–es que...jamas habiamos tenido a alguien asi.– dijo Marlen en respuesta.
–hija,no es un noble,es solo un mercenario,ya hemos tenido mercenarios antes.– le respondio de manera calmada.
–¡no, no puede ser un simple mercenario!–dice la niña,negando con la cabeza.
–¿lo dices por su aspecto?–dijo Dorvish,sonriendo,lo cual incomodo a marlen.
–¡que,no claro que no!– respondio Marlen,volteando la vista con una expresión ofuscada.
–la apariencia fisica no determina el estatus social,hay nobles y ay plebeyos ,feos y atractivos por igual.– dijo,procediendo a explicarle a su hija como diferenciar a los nobles de los plebeyos. –la verdadera diferencia se denota por otros aspectos,un noble viste con ceda y joyas,son altivos y sobre todo,un noble jamas se alojaria aqui,o...siquiera pasaria por este pueblo.–dijo,a lo que su tono cambio repentinamente.
–o tal vez si,ya que ellos no se verian afectados-coloco su mano sobre el hombro de la niña.
–Vamos,ve con tu madre y dile que tenemos un inquilino nuevo,y que pidió comida.– le da un pequeño empujon,instandola a bajar a la cocina.
–si papa.– respondio la niña.
...
Ya solo, tanteo el colchon con mi mano.
–no esta mal.– dije,para despues recostarse.
–no esta nada mal.–dijo esbozando una sonrisa,habiendo dejada su espada reclinada en la pared,su bolsa a pie de cama,glad reviso su bolsillo derecho,saco una vieja moneda de oro. No era un lenar,pero era valiosa.
–debo empezar a juntar fondos.– observo la moneda,los gravados estaban sucios por el tiempo.
Se levanto y abrio la ventana,las bisagras rechinaron al abrirse.
Desde aqui empezo a ver la aldea.
–exeptuando al posadero, el pueblo tiene algo extraño,incluso ahora, la gente que se ve en la calle no parece feliz,ja-ja.–dije,y dejo salir una leve risa. "bueno,no es como si en otros pueblos la gente saltase de felicidad,pero incluso asi, esta gente parece especial mente amargada."
Saque de mi bolsa un mapa gastado.
"Este pueblo está serca de la ciudad costera del este de mirabilia, me servirá para re abastecerme." Mire al exterior por la ventana,un pueblo como este debe atraer gente con negocios turbios, y las cantinas siempre están habiertas por la noche,ya que por la noche se hacen dichos negocios.
Tomé mi espada y la desenbaine,el acero estaba impecable cómo de costumbre.
"Al parecer no requiere mantenimiento,almenos no por ahora."
Deje pasar los minutos estudiando mi mapa,marcando los nuevos puntos de referencia por los que habia pasado con una pluma.
–tal vez necesito un mapa nuevo, este mapa esta viejo,y quebradizo.–dije,metiendo la pluma en el tintero, pero note que ya no tenía tinta.
–diablos.–dije,asta que escuchó pasos dirigirse a la habitacion.
Tome mi espada por reflejo.
Llaman a la puerta.
–habrá,es el desayuno.–dijo una voz de mujer en tono escueto.
–pase.–dije.
La puerta se habrio,y una mujer en sus 40s entró en la habitación,llevaba una charola con un plato con abena,y un baso con vino.
"Debi especificar."pense, estremeciéndome al ver el plato con abena.
–¿donde dejo su desayuno?–pregunto.
–donde sea,supongo que no es importante.–dije,guardando mis cosas, y levantandome de la cama.
–¿Es la esposa del dueño?–
–si.–dijo,dejando el plato en el mueble continuo. –si es todo me voy.–dijo con el mismo desinterés.
–gracias.–dije,la mujer se fue por la entrada.
–¿estara de mal humor?–me pregunte. Escuche a dorvish decir que ya habían tenido mercenarios, quizas no confían en los mercenarios."pense,sin darle más importancia.
...
Pasaron las horas,daba más de la media noche, me había recostado,aun que no había conciliado el sueño.
Era momento de ir a ver si podía hacer negocios,me levanté, pero cuando lo hice,vi por el rabillo del ojo luces producto de antorchas.
"¿y eso?"camine asta la ventana, para ver lo que ocurria,tome mi espada,ya que en el peor caso tendria que salir a punta de espada.
–que sean fanaticos por favor.–,dije cruzando los dedos,"almenos me divertiria en el proceso."
cuando mire a las personas en la calle,observe que iban al centro del pueblo.
"No es por mi segun parece,bueno,me ahorre tener que ponerme violento.",pero ahora tenia curiosidad."¿que es lo que ocurre?"
Me dirigi a la puerta de la habitacion,dispuesto a ver que ocurria en el exterior.
Despues de salir de la habitacion y vajar al recibidor,me encontre con los dueños.
–no salgas por nada,¿entendido marlen?–dijo Dorvish,acercandose e inclinandose frente a marlen, poniendo sus manos en sus hombros.
–si papa... ¡señor!–dijo Marlen,cuando se percato de mi,a lo que sus padres voltearon a verme.
–ah,señor Glad,deberia descansar en su habitacion,esto es asunto de los locales.–
–no es problema,igual tenia pensado salir.–respondi de forma casual.
–salir,a estas horas.–dijo la mujer del posadero.
Lo ignore,no es la primera vez que me tildan de lo peor.
–Meliz,eso no tiene nada malo.–diria Dorvish.
–Dorvish,¿que es exacta mente lo que ocurre?–pregunte.
–¡ah!,gracias por recordar mi nombre señor.–dijo Dorvish.
–verá señor,es la gente de la iglecia local ,vinieron para recolectar la ofrenda anual...– dijo Dorvish,notandose como su rostro y su voz se apagan al final de su oracion.
–ah,es acaso alguna costumbre local?–pregunte.
–algo así,pero esta vez se adelantaron a la fecha.–dijo Dorvish.
–ofrendas,¡que absurdo!-dijo Meliz.–¡barbaros,las cosas que hacen en nombre de dios,no tienen verguenza!-replico con severidad.
–si es un asunto de la fe, si me incumbe.–dije sonriendo.
...
La gente del poblado se reunio en el centro,se habian reunido para precenciar las palabras del clerigo de la iglesia local.
Aparte de el,habian mas hombres vestidos con abito,de los cuales algunos portaban armas.
El saserdote al frente de la multitud,y quien hablaria ante los aldeanos, era un hombre delgado y joven,vistiendo una tunica blanca,con simbolos grabados desde la base asta el dorso,en el extremo superior el grabado de un ojo.
–agradesco a los fieles su compromiso para con la fe cada año,hoy tenemos a un visitante muy importante, que escucho de nuestras costumbres,y nuestra forma de honrar a dios.–diria el sacerdote,señalando a un palanquin llevado por 4 hombres.
A las palabras del sacerdote, le sigueron murmullos por parte de la gente.
–debido a su visita,se decidió adelantar la ofrenda,y se hicieron algunos cambios.–dijo a lo que la gente murmuro.
–disculpe señor, yo quería....–dijo uno de los aldeanos, ciendo interrumpido.
–¿qué cosa?–dijo el sacerdote, su pregunta intimido al aldeano.
–e,bueno,es justamente por el pago de la ofrenda.–
–ya veo,como saben, les hemos permitido a los menos favorecidos, pagar su ofrenda con medios alternos al dinero.–
–si,tiene razon, eso es lo que yo quería preguntar, las personas que podemos pagar la ofrenda,tendremos acaso...–
–ah, ya veo de que se trata, deben estar tranquilos.–dijo el sacerdote con su tono amable.
A lo que la gente de la aldea parecio calmarse.
–después de todo, en esta ocasión se han elegido a las cinco familias que tendrán que dar la máxima ofrenda,en base a ciertos requerimientos.–dijo,y sus palabras cayeron como agua fría.
La tención volvió a apoderarse de todos los aldeanos, ahora independientemente de si pudieran pagar o no, su ofrenda forzada ya fue decidida.
–se seleccionaron a cinco familias de ante mano.–dijo el sacerdote,sacando una lista de su tunica.
Algunas personas, principalmente aquellos que no tenían familia o vivían solos, se mostraron más relajados, en cambio, las familias con hijos empezaron a temer a sabiendas de lo que vendría.
–las 5 familias honradas a participar son las siguentes,empezando con,la familia Idias,deben entregar al mayor de sus 3 hijos.–
Al escuchar esto,una mujer casi cae desplomada al piso,ciendo sujetada por su esposo,la familia idias,por su ropa claramente no eran adinerados.
–la siguente es,la familia Delsart,entregaran a su unico hijo,baya honor.–dijo,volteando a ver a la pareja.
Estos no pudieron hacer mas que desviar la mirada,tratando de no verlo a los ojos.
–la familia Darna,entregaran a la menor de sus 2 hijas.–
El padre de familia al escuchar esto,no pudo mas que apretar sus puños y guardar cilencio.
–La siguente es la familia Shebet,entregaran a uno de sus 2 mellisos,ah,y final mente la familia Dollan,entregaran a su unica hija.–dijo,guardando la lista en su ropa nuevamente.
Los shebet guardaron silencio,pero Dorvish dio un paso al frente asta llegar frente al sacerdote.
–cariño!–dijo Meliz, al ver la accion de su esposo.
Estando de frente,el rapida mente se arrodillo.
–le ruego que reconsidere,mi familia pagara lo que sea,pero le suplico, no se lleve a nuestra marlen.–dijo Dorvish,entre suplicas y arrodillado.
–Asi que por favor,tenga..."
–tu...– dijo el sacerdote con tono despectivo.
Dorvish alzo la vista encontrandose con una mirada de desden.
–Te atreves a contrariar a los representantes de dios,y mas cuando tenemos a alguien tan importante visitando este recondito sitio.–dijo el sacerdote con severidad.
–Droll,aparta a este desleal de mi vista!–
Ordeno,y uno de los monjes a su servicio,un hombre bastante robusto que portaba un acha se acerco.
–espere,yo solo...–dijo Dorvish, tratando de dialogar.
Droll hizo caso omiso de sus palabras,sujeto a Dorvish del cueyo de su camisa, alsandolo con facilidad,y habiendose dispuesto a arrojarlo se prepara.
–¡espere, por favor no!–exclamó Meliz, al ver lo que ocurria.
Pero cuando Droll estuvo a nada de hacerlo,lo sujete del brazo,deteniendolo en seco.
–¡eh!–Droll me miro con sorpresa.
–¡se-señor!–dijo Dorvish entre tartamudeos.
El hombre llamado Droll solto a dorvish dejandolo caer,y sentro su atencion en mi,lo ignore y solte su ante brazo
–tu ,el clerigo,tengo preguntas.–dije,ignorando al hombre frente mio.
–¡tu,quien te haz creido para....!–
–Dejalo hablar Droll.–dijo el sacerdote,levantando una mano en señal de espera.
–no eres de por aqui,¿que deseas?–
–busco la hubicacion actual de la torre de aleto.–dije ,a lo que el sacerdote mostró su sorpresa.
–Aleto,te refieres a ese lugar sagrado,¿y puedo saber por que lo buscas,eres un peregrino?–dijo con una expresión de duda.
–se podría decir que si,pero quiero mantener mis motivos en privado.–dije en respuesta.
El sacerdote me observó,como si pensara en que responder,vio el palanquin, y luego me volvió a ver a mi.
–lo ciento,la hubicacion de ese lugar sagrado no se le es revelada a personas de mi posicion.–dijo con tono precavido.
–ya veo,que perdida de tiempo.–dije,a lo que me di la vuelta,y mire a Dorvish.
–deberias llevarte a tu familia lejos.–dije,a lo que Dorvish no respondio.
–no puede,su familia ya fue seleccionada.–dijo Droll con tosquedad.
–no te hablaba a ti.–dije sin voltear a verlo.
–ya termine mis asuntos con tu amo,no me interesa hablar con un perro.–
–¡que dijiste!–dijo Droll,balanceando su acha hacia mi.
Me di la vuelta,evadi el golpe,desenbaine mi espada,me aproxime y sujete el ante brazo del monje, y lo apunte al cueyo con el filo de mi espada.
–¡kgh,maldito seas ojos rojos!–dijo Droll,maldiciendo al ver mi espada apuntándole al cuello.
–maldito seas tu.–dije en respuesta.
–¡ya basta!–dijo el sacerdote.
–no se derramara sangre inesesaria mente.–señala nueva mente el palanquin.
‐p-pero...–diria Droll entre tartamudeos.
–eh ordenado Droll.–replicó el sacerdote.
–si-si señor.–Droll acato la orden,bajando su acha.
Baje mi espada y la volvi a envainar.
–ja,al final si eres un perro.–dije en forma de burla.
Esto logro provocar nueva mente a Droll,quien me volvio a atacar con el acha,esta vez pare el golpe,pero no con ni espada,si no con mi ante brazo derecho,fue mas una reaccion por reflejo,que algo planeado.
La oja del acha rasgo la piel,y el musculo asta morder mi hueso,y la sangre broto.
La cara de droll se lleno de asombro.
No fue el unico,los lugareños vieron con miedo y asombro lo acontecido.
–bueno,admito que quisas me pase con eso ultimo,¿a mano?–dije de forma casual
–si...a mano.–respondio Droll.
Aleje mi brazo apresurada mente,al separarlo de su acha, mi sangre se derramo en el piso.
Cubri mi erida con mi capa.
–ahora tendre que arreglar esto.–dije,dandome la vuelta,regresando a la posada.
–ah!,espere señor.–dijo Dorvish,tratando de alcanzarme.
–Droll!–dijo el sacerdote con severidad.
–despues hablaremos de esto,pero ahora vamonos.–
–si mi señor.–
La conmocion del momento paso,la gente regreso a sus casas,y las familias notificadas ahora solo podian recordar lo que caeria sobre ellos.
...
Monasterio.
Una vez llegan al monasterio,los transportadores del palanquin
Se detienen una vez entran al mismo.
La persona transportada en el sale,era un hombre,mas joven y alto que el sacerdote,su ropa era una tunica blanca fina con bordados dorados,su cabello era largo de un tono verdoso,y sus ojos eran de un azul celeste.
–Mi señor Radel,lamento que precenciara algo tan...–
–Ese hombre.–dijo Radel.
–¿el ojos rojos?–pregunto el sacerdote.
–si,su sangre tenia un olor desagradable–
–¿quiere que nos encarguemos de el?–
–No,ire yo mismo, cuando menos le servira de advertencia,y no tratara de tocar lo sagrado con sus sucias manos.–dijo Radel,con un tono inexpresivo en su voz.
–Pero señor, usted no debería ensuciarse...–
–¡Erick!–dijo Radel,a lo que el sacerdote Erick guardo silencio.
–Bien,cómo usted ordene señor.–
...
Posada.
Me sente en la cama de mi habitacion,observe la manga de mi habrigo.
estaba manchada en sangre, y tenia una enorme rotura en la parte del brazo,habri un poco la rotura, viendo mi piel bajo la tela.
Piel blanca en medio de la sangre que broto de la erida,la erida se cerro en segundos,pero ahora tendria que irme de aqui.
La mancha de sangre empezo a secarse,y una vez seca, se fragmentoen pequeñas particulas que se elevaron dejando mi piel y ropa.
"Almenos la mancha se quita facil."pense.
–¡señor!-dijo Meliz,desde el otro lado de la puerta en el pasillo.
-mi esposo me pidio que tratase su erida,traje hilo y aguja,entre otrascosas para tratar su erida.–dijo Meliz,con un deje de consideracion en su voz.
"¿Por que ahora es amable?" Pense, pero daba igual,no podia dejar que viera mi erida,o mas bien, la falta de esta.
–¡no hace falta, tengo con qué tratar mi erida,y no es mi primera vez.–dije,técnicamente no mentía.
–¿se-seguro señor?– dijo Meliz,aun con tono preocupado.
–¡si, seguro!,no es primera vez.–respondi,y nueva mente fue verdad.
–esta bien señor,y...gracias, por evitar que ese simio agrediera a mi esposo.– dijo Meliz aun con gentilesa en sus palabras.
escuche sus pasos alejarse,luego de eso saque hilo de coser y aguja.
Mire una vez mas mi ropa,pudiendo aver reacionado de cualquier otro modo,la falta de cuidado me terminó jugando en contra.
Suspire.
– es hora de ponerse a remendar.–