Will estaba furioso, le gritaba a Mirian por todo lo que habia hecho, solamente lo habia visto gritando así conmigo, en reiteradas veces, pero nunca con su hija menor, además le hacia muchas preguntas de porque tenia el ojo morado, pero ella prefirió no decirle, lo que lo llego a molestar mucho mas.
Inclusos los hermanos de Mirian consideraban que su padre se estaba pasando, pero no intervinieron, aunque Lay parecía estar cerca de hacerlo, era la que más estaba enojada por ese trato, y lo sentía muy bien. Así que fui y le puse mi brazo sobre mis hombros, para susurrarle algo.
-Tranquila, quiero que me sigas con un pequeño juego que hare, solo, espera y sabrás cuando actuar. - le dije guiñándole un ojo. Ella no pregunto nada al respecto simplemente accedió.
Obviamente a Hero no le gusto tanto mi acercamiento así que vino a marcar territorio como siempre. Al menos esta vez no fue agresiva con Lay, simplemente tomo el brazo que tenia alrededor del cuello de Lay y lo saco de ese lugar, haciendo que ahora la agarrara a ella por la cadera. Se que debería cuestionarle estas acciones, pero en el fondo me gustaban, lo que confirmaba mis sospechas que estaba tan mal como Hero.
Will proseguía castigando a Mirian sobre todo porque ella había comenzado a contestarle con insultos, sin duda, empeoraba las cosas, pero si quitaba el mal comportamiento de su hija, podía entender a la pequeña, que admiraba tanto a su padre y que ahora era una especie de sombra del hombre que era.
-Cariño mío, me saltare el plan y actuare ahora aprovechando que estamos a fuera y están todos.
-Como quieras querido... tendré que romper el vestido, ¿no te molesta?
-Lo unico que me molesta es que no pueda romperlo yo Hero, te amo, bueno comenzare con esto.
-Suerte Gran.
-¡¡Will!! - Grite.
Apenas pudo reaccionar el antiguo Sir Willfest, lo ataque directamente al cuello con mi daga, pero el alcanzo a bloquearlo muy justo, con su espada que desenvaino. Todos y cada uno de las personas que nos estaban observados quedaron atónitas, porque en este punto me consideraban un loco.
-¿Qué carajos es esto, Gran? -pregunto Will.
-Sera mejor que me ataques, porque voy por tu cabeza.
Active mi mayus dejando fluir más de lo que solía hacerlo, apenas un poco más, entonces me moví con una finta que al fin el no pudo prevenir, pero si esquivo llevándose un simple rasguño en el cuello.
-Gran te volviste loco, por que atacas a tu propio maestro. - grito Ivan algo desesperado.
Yo simplemente lo ignore, yendo nuevamente al asecho, esta vez me agache preparándome para moverme rápidamente a ras de piso. En un simple parpadeo yo ya estaba nuevamente pegado a Will propinándole una estocada con la daga que el logro parar con su espada, pero gracias a mi mayus, la fuerza de impacto hizo que su guardia quedara totalmente abierta.
En eso Lay se sumo al ataque yendo directamente por el pecho de su padre. Will tuvo que lanzarse al suelo para poder esquivarlo, si no estaría muerto.
-¿Pero qué mierda sucede con ustedes? - pregunto Will con algo de desesperación en su voz.
-Mi padre hubiera podido parar eso sin problemas. - dijo Lay sin demostrar sentimiento alguno.
-Detengan esta locura. - protesto Will.
-Si quieres que nos detengamos, entonces detennos tú padre. - grito Roy que le mando un espadazo aun en el suelo, donde Will alcanzo a abrir las piernas para que no le llegara el ataque.
Will dio una voltereta hacia atrás, no le dábamos ningun espacio para atacar, aun así se las arreglaba para desviar nuestros ataques, de momento yo era el unico que le provocaba heridas en su cuerpo, todas superficiales porque o alcanzaba a desviarlas o a esquivar en el ultimo segundo, pero todo empeoro para él.
Hero rompió su vestido para poder moverse más cómodamente, ella saco la daga gemela a la mía que tenia oculta debajo de la falda.
Yo acometí tan fuerte contra Will que nuevamente habia roto su defensa, acto que Hero aprovecho, ella hizo una acrobacia para saltar sobre mi, y aprovechando el giro en el aire ataco con toda la caída a Will, dándole una herida en su ojo derecho.
-Mierda... maldita mujer.
-Falle. -se quejo Hero.
Mirian miraba horroriza lo que estaba sucediendo, quería a su padre, estaba enojado con el, pero esto era pasarse en toda la regla para ella, así que intento intervenir.
-Deténganse, ya paren, no le hagan daño a mi padre.
Gwyn se lanzo hacia ella deteniéndola, forcejaba para que la soltara, pero nuestra pequeña tenia mucho más experiencia que ella.
-Estas loca, suéltame maldita deslenguada, van a matar a mi padre.
Nuestra pequeña intentaba comunicarse con ella, hacia sonidos que Mirian no entendía, pero le indicaba con una mano hacia nosotros, intentaba calmarla, pero eso no le servía a Mirian.
Lay se movió entre las costillas de su padre, con el pomo de su espada lo golpeo dejándolo sin aire y Roy le golpeo en la cara con el plano de la espada votandolo al piso.
-Eso es todo lo que puedes hacer ahora Will, esto es lo que queda del Sir que me dio una paliza, es lamentable. - le dije mientras me acercaba a él.
El estaba mareado despues del golpe que le dio su hijo, con una mano temblorosa hiso un gesto para que nos detuviéramos. El ni siquiera habia recuperado la respiración y por suerte Hero no le alcanzo a dañar el ojo, pero no podía ver por el por la sangre.
Mierda, si que me volví viejo, lamentable, he... si es lo que soy, al fin al cabo perdí todo, la persona que ame, mi esposa, mis tierras, mi titulo, el respeto de mis propios hijos, incluso mi adorada Mirian que siempre me admiraba ahora me odiaba... soy un desastre. La edad me sento muy mal... a todo esto ¿Qué estaba haciendo?
-Deja de lamentarte Willfest, tú no eres el hombre que pudo repeler mis ataques, que paso, tanto te dolió perder contra Arthur.
-¿Quien eres?
-No importa quien soy, importa lo que tu eres Willfest Marshall, el carnicero de Francia, o el defensor de Inglaterra, ¿Acaso crees que tú maestro al envejecer perdió sus colmillos?, mira a esa pelirroja que fue entrenada por él, crees que alguien que se sintiese viejo podría haber pulido esa gema en bruto, ¿hasta cuando seguirás mirando el piso?
-Mierda...mierda...mierda... cállate no queda nada de ese hombre, no queda nada...
-Entonces que son esos ojos de esa niña que pese a todo sigue admirándote, al menos lucha por tú hija, Will.
-No puedo hacer nada... Babette, amor ¿eres tú?
-Ya te dije que no importa quien soy, importa quien eres tú, como permites que Granet, con su mujer y tus hijos te den una paliza y tú sin hacer nada, que queda de ese hombre que mato a largovivientes estando en total desventaja. Alza el vuelo, Willfest, cumple las promesas que dejaste sin cumplir.
Me detuve, pero no fue por la señal de Will, si no porque senti la presencia de Morrigan en él, lo que me hizo ponerme totalmente a la defensiva.
Will se levanto aun tropezando, empuño su espada con mucha más seguridad y respiro profundamente, hasta que la envaino, dándome entender que todo esto fue para nada, no logre ni siquiera traerlo de vuelta lo que era frustrante, habia pensado que con esto lo obligaría a volver en sí, que podía recuperarlo, pero falle.
-¡Gran cuidado, muévete! - grito Roja.
Will se agacho un poco y se lanzo contra mi como un jabali salvaje, el desenvaino con toda su fuerza, pero pude bloquearlo sin problemas, solamente porque tenia mi mayus activado, si no, ese movimiento me hubiera matado sin dudas, y me acorde de algo que una vez Will le dijo a Roja; el jabali ataca siempre dos veces.
Como si fuera un bateador Will hizo su segundo corte, yo fui al encuentro de su espada con mi daga, y no pude creer que pese a mi mayus él rompió totalmente mi defenza dejándome desprotegido a una nueva arremetida contra mi, pero Lay desvió su ataque salvándome.
Will comenzó a moverse más rapido esquivaba y atacaba casi al mismo tiempo, a Roy le dio una patada en su pierna, haciendo que una de sus rodillas tocara el piso, y con el plano de su espada le devolvió el golpe que le habia dado con anterioridad, dejándolo totalmente inconsciente.
Roja se sumo al ataque aplicando la misma técnica que su maestro le habia enseñado a ella y a Will, mismo movimiento con el que me habia desarmado, pero como la vez anterior Will la desarmo y la hizo estrellarse contra el suelo, para luego darle una patada en la cara.
Mirian se habia calmado, lo que permitió soltarla, Gwyn sonrió al ver la cara de admiracion de su nueva amiga, así que se sentó al lado de ella.
-Will antes de continuar, me alegro de volverte a ver, y mira hacia alla que no soy el unico.
Will miro hacia donde le apunte con mi cabeza, veia el rostro de orgullo de su pequeña, lo que puso una sonrisa en su boca.
-De vuelta, pero si apenas estoy llegando, ahora menos chachara y más acción, no creas que dejare estos ataques impunes contra mi Señor de pacotilla.
-Eso esperaba de ti Will.