Habíamos llegado a un a una pequeña ciudad, y le decía así, porque nombrarla pueblo seria faltarle el respeto, era mucho más grande que uno, pero algo pequeña para una ciudad.
El lugar estaba construido aprovechando las antiguas murallas de un castillo, parecía algo tranquilo, eso si estaba lleno de ingleses por lo que me daba a entender que probablemente muchos de los que vivían acá probablemente eran las esposas o familia de los guardias.
-Sir Ivan antes de conocer a su familia, me gustaría poder pasar a alguna forja que Magnus pueda utilizar.
-Si, te llevare a la única que hay, solo sígueme Sir Gran.
Mi prometido nos hizo la seña para que lo siguiéramos. Todo era muy bonito, una vida pacifica, extrañamente ideal para esta época.
Algo hacia que estuviera alerta, esta extraña paz me molestaba por alguna razón, incluso en mi tiempo que estuve recluida con Argus, donde no sabia que era una prisionera y las cosas estaban calmas, sentía esa necesidad de estar alerta, pero acá no, y eso me molestaba más que nunca.
Tire de las mangas de Gran que estaba centrado en ir a una forja.
-¿Qué sucede Hero?
-Que raro, no pense que me prestaras atencion a buenas y primeras cariño.
-Por que no te prestaría atencion, querida.
-Cuando estabas tan metido en los libros, solías poner el mismo rostro de alguien duro, sueles hacer eso cuando te concentras en algo, y no me pescabas cuando estabas metido en tus estudios, Gran.
Gran agarro una de mis manos que tenia en mi cintura, y se la llevo a sus labios para darme un besito.
-Te perdí por un año, todo lo que hagas me interesa... ¿sabes? Hero, decir eso en voz alta hizo que me sintiera como alguien enfermo.
Le mordí la oreja por eso, donde se quejo bastante, a punto que cuando miro mi rostro comprendido que me habia enojado. Habia dicho algo bonito para mi, para que luego lo arruinara con esa tontera, sin duda este hombre era mi Gran, eso me ponía alegre, porque aun quedaba algo del chico tonto en él, algo que nunca iba a admitírselo.
Llegamos a una típica forja, con un horno de piedra, yunques, banco de piedra para afilar, un peletero y unas maderas donde colgaban un montón de herramientas.
-Sir Ivan de esas casualidades tendría una armadura que le podría comprar, para ella, y una cota de mallas también si es posible... mejor dos.
-Le pediré a uno de mis hombres que las traiga, considéralo un regalo por las molestias Sir Gran. Una cosa más mi herrero se encuentra en Dublín así que no podrá ayudarlo.
-Tranquilo no es necesario, para eso trajimos a Magnus. Will, Roy, Roja, acompañen a Sir Ivan hasta su castillo, yo los seguiré apenas termine acá, y protéjanlo, si es que quieren atacarlo o a su familia.
-Si Sir. - gritaron todos al unisonó, algo que le dio mucha vergüenza a Gran, se le notaba por sus mejillas sonrojadas.
Sir Ivan se vio sorprendido, esperaba a que lo acompañáramos a conocer su familia de inmediato, pero para Gran era más importante esto, lo que me indicaba que algo tramaba, aun así el Sir, agradeció la escolta.
-Enviare a uno de mis hombres a que lo guie al castillo, al menos espérenlo.
-Por su puesto Sir Ivan. - dijo Gran.
Una vez Ivan se marcho, Gran me bajo del caballo agarrando por la cintura.
Todos miraron se habia alguien alrededor si estaban pendientes de nosotros, que por suerte no lo estaba.
Algo raro esta sucediendo aqui, dijimos todos a la vez, cosa que nos dio algo de gracia.
-Todo esta muy tranquilo cuando supuestamente me dijiste Gran que quieren matar al lord y a su familia.
-Pienso lo mismo que Magnus, Gran, algo esta esta sucediendo, y me tiene muy intranquila.
-Lo sé Lay, algo me da mala espina de todo esto, pero dejemos pasar eso por un rato, Magnus necesito que ajuste una armadura para ella, que prefieres cariño, algo más ligero, o de peso mediano y que proteja más.
-Preferiría algo mas ligero de lo que sueles usar Gran, que no me entorpezca al moverme, para poder ocupar bien la daga, o tal vez si me dejas, ocupar las dos.
-Ya escuchaste Magnus, te pido que puedas modificarle la que te traigan para ella, y también quiero que ajustes dos cota de mallas, una para Gwyn y otra para Mirian.
Lay se extraño demasiado por mi pedido.
-¿Por qué para mi hermanita Gran?
-Tome la decisión de que las niñas nos acompañen, no quiero dejarlas con Sir Ivan, y Magnus tu te quedaras y serás un nuestro chivo.
-Me quejaría, pero si quedo lejos de la guerra, me parece perfecto, pero modificar una cota de mallas para dos niñas, o peor, llevarlas a la guerra, eso me parece excesivo, y no creo Alice este de acuerdo.
-Pues te equivocas, se lo que piensa Gran, y confío en su decisión, además estoy seguro que si dejáramos a Gwyn en casa, ella se escaparía para seguirnos... o al menos eso quiero pensar, pero la parte de que se escaparía es seguro.
Gwyn hizo un sonido para demostrar que lo que estaba diciendo era verdad, asunto que no me gusto mucho, porque la chiquilla admitía que se fugaría.
En cambio la reacción de Magnus era desaprobatoria, pero tampoco era que tuviera mucho que decir, además me molestaba mucho su rostro, era ver a papá, pero como si se hubiera perdido en su camino, eso me desagradaba mucho, preferiría mil veces no tener que hablar con él.
-Ya esta dicho entonces, así que Gwyn te podrías quedar quieta unos segundos para que el tío Magnus te tome las medidas.
-Tú ganas Gran, pero no creo que a Will le agrade la idea de llevar a su hija a la guerra, es algo que se que estará en contra, y hare lo que puede con la cota de Mirian, sin tener sus medidas exactas tampoco puedo hacer mucho. Mirian es un poco más grande diría unos 10 cm, más alta, y de contextura son parecidas, pero Mirian tiene algo más de peso. - examino Magnus.
-Will obviamente tendrá la ultima palabra, es su hija, como Lay también puede decir lo que quiera, eso es algo que se los dejare a ellos, pero no tendremos mucho tiempo tampoco, planeo irme al amanecer, si es que no nos intentan matar antes. - dijo Gran pensativo.
Magnus comenzó a tomar las medidas a nuestra pequeña, sin duda, le costaba una enormidad quedarse quieta, o no le gustaba, en varias ocasiones le tiro el pelo o golpeo directamente a Magnus, sobre todo cuando le puso la cinta de medir sobre su pecho, lo que me daba entender que al menos ya se preocupaba por esas cosas, algo de lo que Gran también se dio cuenta.
Tome del brazo a Gran para alejarlo un poco.
-A todo esto Gran hay algo que no hemos pensado, supongo que ella ya comenzó con su menstruación, o si no debería empezar pronto, si tiene doce años, a lo más tardar podría darle a los quince, pero es algo más inusual.
-Tienes razón no habia pensado en ellos Hero, recuerdo que tu lo tuviste a los trece.
-¿Un momento, como es que sabes cuando tuve mi primer sangrado?, eso solo se lo dije a papá.
-Amor, dejaste una escena del crimen en el baño, además me acuerdo que te cambiaba mucho el humor, y antes que pongas esa cara, no estoy criticando, yo mismo era el que te llevaba los guateros para que te sintieras un poco mejor.
Gran era tierno en ese sentido, siempre se preocupaba por mi cuando notaba que estaba en mis días, y no era de las que sufrían mucho por suerte con la situación, solo a veces me venia una que otra más fuerte, pero de alguna manera se daba cuenta de todas esas ocasiones, incluso a veces preparaba cosas antes de que me llegara.
Un mozo nos interrumpió, habia llegado con las armaduras que Gran habia pedido, luego Magnus, tomo mis medias, las anoto y comenzó a bosquejar en un papel con lo que tenia.
-Ocupas otra arma aparte de una daga Alice. - pregunto Magnus
-No ninguna, no se manejar nada más... aunque siempre me gustaron las lanzas, tal vez debería aprender a ocupar alguna.
Gran miro a Lay.
-Se que quieres pedirme, pero si adelante puedo enseñarle, pero no soy experta en ello apenas la utilizo en entrenamientos, solo podre ensañarte lo básico Hero. - menciono Lay.
Ahí iban otra vez, simplemente se entendieron con la mirada. Despues de nuestra conversación, se que a Lay no le gustaba Gran, pero aun así me daban celos estas situaciones, cosa que debía empezar a calmar.
-Te agradecería si pudieras enseñarme Lay, hablo enserio, aunque, preferiría seguir ocupando mi daga como arma principal, no estaría mal saber ocupar otra arma.
-En nuestros tiempos libre, le enseñare ocuparla, pero he de advertir, que soy algo dura en los entrañamientos, supongo que lo herede de mi padre, pero descuida Gran, no ocupare una maza como lo hacen contigo. - dijo Lay eso ultimo en broma.
-Miren que salió graciosita, aun tengo marcas de ello, algún día me vengare de Will, pero, ya vámonos, nos vienen a buscar. Te encargo todo entonces Magnus, y si te alcanza el tiempo prepara una lanza.
-No quieres también que prepare armas para un ejercito, Gran.
-No seria una mala idea Magnus. - dijo media en broma y medio enserio Gran.