Me dio algo de asco ver a Mons totalmente desnudo amarrado en un árbol con una mordaza en la boca para que no pudiera gritar, en el pecho, por lo visto Roy le habia escrito con la espada pedrastra.
Mons se contorsionaba, era obvio que intentaba decirnos algo, pero no me apetecía escucharlo.
-Que mierda acaban de hacer ustedes dos, si alguien se entera de esto la reputación de Gran esta acabada.
-Tranquilo Will, nadie vio a Roy hacer esto, así que estamos bien, lo que no significa Roy, que comparto el método que utilizaste, pero bien hecho supongo, ¿ahora era necesario desnudarlo?
Will se me acerco molesto y Roy no contesto la pregunta.
-Esto es todo lo contrario a bien hecho, tenemos al Baron de Mons aqui, que crees que dirá cuando lo soltemos.
Fue extraño, ya que, el unico que no se habia dado cuenta de la situación de todo los presentes de lo que iba a suceder era Will.
-Me sorprende que tú al ser tan perspicaz no entiendas lo que va a suceder... familia de Poart, pueden hacer con el lo que quiera, pero tiene que morir, y necesito su cabeza intacta, se la enviaremos a Irish, aunque, será como anónimo.
-¿Gran estas seguro de esto? - hablo Lay fríamente arrebatándole las palabras de la boca a Willfest.
Se notaba lo incomoda que estaba Amelia con esta situación, ella sabia lo que se venia.
-Si adelante, solo lo quiero muerto, y ustedes lo desean mucho más que yo, solo dejen que me retire con Amelia unos minutos mientras ustedes hacen lo que tengan que hacer, Roja, ven vamos...
Al dar un paso mi pie cedió un poco provocándome que me cayera, pero Roja detuvo mi caída.
-Ven vamos Gran, yo te ayudo.
-Gracias Roja, lo agradezco.
Escuche el desenvainar de la hoja de Willfest, acto seguido también se escucharon las espadas de sus hijos.
-Gran, gracias, solo tengo que decir eso. - dijo Will.
Preferí no decir nada, tampoco mire nada de lo sucedido, lo unico que supe fue que le quitaron la mordaza porque se escucho la voz de Mons despotricando contra los de Poart, luego pidiendo piedad, hasta que finalmente se escucharon sus gritos, chillidos que escucharías de un cerdo en el matadero.
Roja en un momento iba a voltear a ver, pero se lo impedí, sea lo que ellos estaban haciendo con ese cadáver, era mejor no verlo, porque me imaginaba que acto inhumano se estaba llevando acabo.
-¿Roja sabes por que ellos estas torturando a Mons antes de matarlo?
-Si, Gran, Lay me conto la historia, pero esto me parece demasiado.
Roja la estaba pasando mal con los gritos de Mons, sus ojos estaban lagrimeando, así que decidí tomarle la mano.
-Todo estará bien, tranquila, si te preocupas en como puede afectar esto a Lay, no lo hará, tenlo por segura.
Lo que decía era una mentira, podía sentir la hostilidad de Lay dentro de mi, un animal salvaje listo para engullirle sus colmillos a su presa.
-Al fin se detuvieron los gritos de ese hombre, me afecto más de lo que creí Gran, ¿ellos son siempre así?
-No Roja, no lo son, simplemente como ya tú sabes ellos tenían una deuda con Mons que la acaban de saldar, tampoco soy de aceptar lo que le están haciendo, pero no puedo meterme en ello, y por culpa del desgraciado, tanto como Mirian, Roy y Willfest casi mueren, así que aparte de por conveniencia, fue por eso que decidí que muriera, y no creas que me siento bien con eso.
-He aprendido que eres más frágil de lo que aparentas, no intentas hacerte el rudo ni nada, no te molesta que te vean siendo débil, creo que eso es bueno, pero lo que más me preocupa de todo esto es Lay, ella estaba cubierta de sangre, como si se hubiera bañado en ella, y si le sumamos esto, ella esta más mal de la cabeza de lo que creí.
-¿Te arrepientes de estar con ella?
-¡No!...es solo que... me da algo de miedo su agresividad, Gran, como puedo llegar a ella con tanto odio en su corazón.
-Te equivocas en algo Roja, no es odio lo que hay en su corazón, es miedo, un miedo abismal que la consume. - dije mientras me tocaba el pecho como si estuviera tocando el de Lay.
El silencio se prolongo, pero con Amelia preferiríamos no mirar atrás, hasta que ellos se acercaran a nosotros.
-Si lo que dices es cierto Gran, y sumado a lo que ya se de ella, no se como llegar a su corazón.
-Roja no te preocupes, para eso me tienes a mi, yo también quiero sanar a Lay, no será fácil, pero quiero que sea libre de sus cadenas, además Lay es una hermana para mi, deseo su felicidad, felicidad que creo que tal vez tú puedas dársela.
-Los dos pueden dármela.
Lay se acerco a nosotros, me abrazo por el cuello y me dio un beso en la nuca. Amelia se puso muy Roja al darse cuenta de que Lay nos escucho.
-No te doy un beso a ti Amelia, porque mi familia podría vernos, pero ese beso también es para ti. - Dijo Lay felizmente.
Eso si que no me lo esperaba una muestra de cariño de Lay hacia Roja en publico, supongo que su mundo a cambiado mucho en este tiempo.
-Descuida, ya tendremos nuestro momento, además Gran prometió que nos daría un día libre a las dos, para hacer lo que queramos juntas.
Lay pregunto por eso algo confundida, me miraba a mi específicamente.
-Se lo prometí a ella Lay, Roja te recomiendo el bar Trébol verde, ahí dentro podrán hacer lo que quieran los dos, yo invito, por el buen trabajo que hicieron... que mierda digo, ustedes siempre hacen un buen trabajo.
Amelia no miro a Lay a la cara, se apretaba el brazo, no se si por nerviosismo o aun estaba afectado por lo que sucedió y como vio a Lay en la guerra.
-¿Te apetece hacer eso Lay? - pregunto Roja.
-No es mi tipo de ambiente, no me sentiría cómoda la verdad, pero si quieres ir, y hay whisky, podemos intentarlo.
Antes de que Amelia respondieran con algo de alegría, Willfest y Roy se acercaron a nosotros, Willfest cargaba con algo en vuelto en lo que era parte de capa rasgada.
-Es la cabeza, ¿cierto?
-Si, me imagine que si te la traía sin taparla, te hubieras horrorizado.
-Gracias por eso, pero despues de ver todos lo horrores que vi ahí arriba en la batalla, no creo que me vaya afectar... necesito ahora que esa cabeza llegue a Irish, ¿alguna idea Will?
-Si, conozco a alguien que no hará preguntas, déjamelo a a mi.
-¿Como se siente despues de esto? - pregunte.
-Es como cerrar un capitulo de un libro, se siente bien habiéndole quitado a alguien como Mons al mundo. -vocifero Roy con frialdad.
-No tengo que sumar nada más a lo que dijo mi hijo, lo mejor que podía hacer con ese bastardo era matarlo, para que no se acerque nunca más a mi hija. - Exclamo Will.
Mire a Lay.
-Yo vengue a mi hermana, no tengo más que decir.
Que curioso que lo que dijo lo más normal fuese la que disfruta torturando a sus enemigos antes de matarlos.
-Haremos como que nada paso, tiren el cuerpo por ahí, si nos preguntan no hemos visto al Barón... con esto entonces avanzaremos a la segunda parte de plan.
-¿Segunda? - pregunto Roja extrañada.
-Si segunda, atacaremos directamente al Duke Argus, si no será una molestia mucho más grande, se que él esta tomando los pueblos del norte en este momento, lo que significa que esta cerca de Leap, si el llega a conquistar Leap, será mucho más problemático poder hacerme de ese castillo, si hay alguien que honestamente preferiría evitar a enfrentar es a Argus, pero ya no me queda de otra, que dices matalobos, ¿quieres al fin ganarte ese titulo como corresponde?, terminando el trabajo que no pudiste hacer cuando joven, Will.
-Mocoso, estas colmando mi paciencia, agradece que debo servirte, si no te hubiera golpeado por llamarme matalobos, pero tienes razón en algo, seria mejor no enfrentarlo, en estrategia estamos acabado con él, es el hombre más inteligente que conozco, así que no veo por donde podemos salir ganando contra Argus, al menos que tú tengas algo pensado.
-No, he pasado mucho al respecto la verdad, pero si quiero enfrentarlo necesito el apoyo de los Irlandeses.
-Gran déjame decirte que si querías el apoyo de los Irlandeses con esta guerra perdiste toda oportunidad de ello, sobre todo ahora que mataste a Finley, los que alcanzaron huir transmitirán ese mensaje, les quitaste a un símbolo para ello.
Me estire porque mi cuerpo lo pedía.
-Entonces devolvámosle su símbolo, ya puedes mostrarte.
De entre los arboles apareció una figura enorme, con los brazos caídos, me miraba desafiante aun queriendo venganza.
Willfest era el más sorprendido de todos.
-Me mentiste muchacho.
-Si lo hice para que todos creyeran que realmente estaba muerto, por qué crees que lo grite cuando te respondí.
Finley se acerco a nosotros.
-Bien muchacho ahora dime, ¿Cómo piensas recuperar mi país?