La siguiente semana fue infernal, en mis mañanas me sacaban correr por un par de horas, luego de eso comíamos y volvíamos al ejercicios, abdominales, lagartijas, sentadillas, me hacia cargar rocas grandes de un lado a otro, cuando terminábamos venia lo peor parte, Willfest pescaba una vara de madera y me golpeaba en el estomago, según para obtener resistencia hacia los golpes, pero al Sir siempre se le pasaba la mano, cuando terminamos de entrenar terminaba vomitando casi todos la veces.
-Gran Mañanas llegaremos a Dublín, antes de entrar a la ciudad necesito que me entregues tu cuchillo y amarrarte las manos, te llevare directo donde Irish, es posible que te encarcelen eso si, ahí veremos como salvarte el pellejo.
-Ósea no tienes un plan, que confiado debo sentirme Willfest.
-No saco nado con planear algo, si no se que piensas decirle al Lord, pero ten cuidado, con lo que dices... ¿sabes como comportarte con la nobleza?
-Reverencia al presentarse, no mirarlo a los ojos cuando me habla, no contradecirlo, no ser irónico y no insultarlo, ¿me falto algo Willfest?
-Mamarle la verga - Dijo Magnus entre risa.
Me sentía algo incomodo cuando conversaba con Magnus tanto su rostro como su voz son casi iguales que la de mi padre, me sentía triste con él por saber que el no es mi padre.
-Si no creo que haga eso ultimo...
-Sabes como comportarte eso es bueno, Gran ven sígueme necesito conversar contigo.
Todos se extrañaron porque Willfest quería hablar conmigo, todos menos Roy.
-Roy, Lay, cuiden a su hermana mientras salgo a caminar con Gran.
Ambos hijos asintieron, Lay parecía algo preocupada por tener que conversar con su padre.
-Y a mi que me coman los perros, ¿no?
-Magnus tu eres bastante mayorcito para que dos críos tengan que defenderte, tu deberías ser el que los proteja, sin vergüenza- dijo Willfest entre risa y molestia.
Magnus se hacia el ofendido, pero se notaba que estaba bromeando.
Willfest nos hizo caminar un buen rato sin decir ninguna palabra, mi cuerpo ya estaba lo suficiente cansado como para seguir moviéndose y ya estaba atardeciendo.
-Willfest, podríamos hablar ya, no puedo seguir caminando, mis piernas ya no tienen fuerza.
-Supongo que sí. ya estamos lo suficientemente lejos.
-Mira muchacho solo da un par de pasos más y disfruta.
Willfest nos había conducido a una especie de risco... no era más un mirador natural, la puesta de sol, con el bosque y al fondo la ciudad de Dublín era preciosa, probablemente si hubiéramos continuado el viaje habríamos llegado de madrugada a la ciudad.
-La vista es preciosa, pero dudo que me trajeras acá por el paisaje.
-Hasta alguien como yo, puede apreciar algunas cosas Gran, pensé que seria un lugar indicado para charlar.
Si quisiera tener una cita con alguien especial te creo, no me digas que le gusto al Sir... no eso es imposible.
-Gran tuve que haberte preguntado esto el día que te conocí, ¿de que conoces al Justicar Barón Thomas FitzGerald?
-A era eso, la verdad no lo conozco de nada, pero es extraño que le digas Justicar cuando ahora ese titulo le pertenece a Irish.
-Lo diré sin rodeos Gran, Thomas es un gran amigo mío, uno de los pocos que me quedan si es que sigue vivo, necesito preguntarte si lo que dijiste sobre que tenias un mensaje para él es verdad, o también fue parte de tú mentira.
-Todo fue una mentira, Bert... él me conto que a Irish no le gustaba que preguntaran por él, entonces se me ocurrió que si decía su nombre me llevaría con irish, Willfest.
-Muchacho listo, te funciono, pero ¿por que de todas las estupideces que pudiste hacer, decidiste conocer a Irish?
A Willfest no le podía explicar las cosas como lo hacia con Lay ella conocía mi verdad, eso se sentía bien, pero estoy seguro que Willfest no me creería como lo hizo su hija.
-Digamos que busco algunas respuestas que creo que él puede darme, o al menos puedo sacar alguna pista de conocerlo.
El sir se quedo un rato contemplando el paisaje sin decir nada.
-Sabes me gustaria dejarte ir, pero no puedo, Arthur o Wallet terminaran hablando de ti en algún momento y eso me pondría en graves problemas con Lord Irish, solo se me ocurre una salida para tú problema Venture, convierte en mi escudero, si yo hago la petición durante tu audiencia, por mucho que Lord Irish quiera matarte lo pondría en problema gracias a mi amistad con el rey.
Solté una pequeña carcajada.
-Si mi vida realmente peligra, y necesito ser salvado, hazlo por favor, aprecio mi cabeza sobre mi cuello, pero que debo hacer a cambio.
El sir tomo aire.
-No me agrada lo siguiente que te diré, pero a cambio casata con Lay Gran, y as que abandone esta tonta idea de ser caballero.
Realmente Willfest me esta pidiendo que me case con su hija.
-Willfest creo que estas mal interpretando las cosas.
-Que yo las mal interpreto, se muy bien que pasaron la noche juntos Gran, el día que fui a buscar a Lay a su habitación ella apestaba a whisky barato, y habían curiosamente 2 vasos, luego tu apareciste más tarde apestando al mismo whisky barato, no hay que ser un adivino, además ustedes dos se llevan muy bien, y le as devuelto su sonrisa, algo como padre debo agradecer, además piensas que dejare libre al mocoso que le quito la virginidad a mi hija.
Este idiota se creo una pelicula que no es, como se supone que deba salir de este embrollo, por un carajo Willfest.
-Willfest me siento muy alagado, pero estas muy equivocado con todo.
Willfest se estaba poniendo de mal humor por mis replicas.
-O no, si intentas escapar del compromiso por la afrenda a mi hija te aseguro que yo en persona te matare.
Willfest hablaba muy enserio sobre lo de matarme.
-Willfest escucha por una maldita vez, es cierto que con Lay pasamos una noche juntos, pero no paso nada, tú hija... sigue siendo virgen...mierda por desgracia tampoco lo és... ella estaba mal, me pidió que la acompañara eso es todo, además solo somos amigos, algo que hablamos entre los dos, además yo no le gusto a tu hija, y yo amo a Hero.
Willfest puso un rostro repulsivo.
-Te enamoraste de tu hermana, que asco, ya sabia que eras raro, pero, ¿enserio?
-No, no, haber con Hero realmente no somos hermanos, solo fuimos criados juntos, mi padre la adopto cundo era niña.
-Aun así sigue siendo repulsivo Gran... bien, dejare el tema del matrimonio a un lado por el momento, me conformo que logres hacer que Lay abandone la espada.
Me puse al lado de Willfest a contemplar el paisaje.
-No hay trato, ¿por qué te empeñas en alejarla de lo que ella escogió?
-Gran es mi hija, a ella se le esta pasando el tiempo de casarse ya tiene 19 y a rechazado a todos los futuros lores que le he presentado, además es mi deber como Padre mantenerla a salvo, crees que el camino de la espada, ¿es algo seguro para ella?
-No definitivamente no, pero es el camino que ella escogió por ella, por mucho que seas su padre y te intentes imponer a su elección es ella la que tiene el timón del barco, deberías respetarla por ello, no meterse en su camino.
-¿Respetarla?, Gran as visto a otra mujer soldado, que crees que son capaces los demás, Lay quiere ser caballero, crees que los demás escuderos y caballeros permitirán romper una tradición tan antigua que le pertenece a los...
-Alto ahí, primero aunque te cueste creer Willfest, de donde vengo he visto mujeres soldados, incluso en altos puestos, no intento cambiar tú manera de ver las cosas, pero las hay, segundo una mierda con lo que piensen los demás, si tanto te preocupa en vez de meterse en el camino de tú hija, acéptalo como el hombres que dice ser, apóyala y protégela de los idiotas que intenten hacerle daño, eso es lo que debería ser un padre.
Ni me percate en que momento lo hice pero tenia agarrado a Willfst del cuello de la armadura, estaba enojado por las estupideces que escuchaba.
Willfest me agarro con mucha fuerza el brazo con el que le sostenía la armadura, aun así no lo solté.
-Gran, le prometía a Babette la madre de Lay antes de morir, que la protegería de todo, ese es mi deber, por eso rechazare siempre el camino que Lay tomo, porque es un insulto del deseo de su madre.
-Felicidades caballero, as un infierno de la vida de tú hija por la promesa que no pudiste cumplir, e intentas enmendar.
Le iba a decir que poco importaba la promesa de un muerto, pero creo que eso era pasarse de la raya.
-Hablare con Lay, pero eso será todo, no pienso alejarla del camino que ella decida, yo hare lo que tu no fuiste capaz de ser, apoyarla, se acabo la conversación Willfest, conozco el camino de regreso, y descuida no pienso escapar de ti, hazme el favor y púdrete.
Estaba seguro por la expresión que puso que me golpearía en la cara, pero no lo hizo, hera un hecho que le había herido el orgullo.
Regrese solo al campamento, por lo visto Willfest se quedo en el mirador.
Con toda la discusión olvide preguntarle por que la manía con Velaria cuando la vio en el bosque, parecía un hombre endemoniado, pero ¿por que sigo pensando en ese inútil?
Lay estaba prendiendo el fogón, Roy volvía con unos peces que logro pescar en el río, mientras que Magnus trabajaba en algo.
-¿Que haces Magnus?
-Termino tu armadura niño, si siguiera en la forja ya estaría lista, pero no estamos ahí ¿cierto?
-Cierto... que es esa ¿A.V?
-Es la firma de mi familia, marco todo lo que hago con eso, en este caso la borde, felicidades Gran tendrás un armadura hecho por el mismísimo Magnus Crafters.
¿Qué curioso, por que me suena ese nombre?
-Espero vivir para ocuparla Magnus.
-Más te vale vivir, sino te volveré a matar por hacerme trabajar para nada.
-Lo tendré encuentra.
-¿Gran que sucedió con nuestro padre?- Pregunto Roy algo preocupado.
-Se quedo contemplando el paisaje, Roy.
Los hermanos me quedaron mirando extrañados, pero no preguntaron más.