—Zander, tenemos que hacer algo al respecto, ¿no es así? —preguntó Amanecer, se sentía muy nerviosa al saber que había una posibilidad de que el Rey Rowan pudiera oponérseles, en ese caso, Cenit estaría en gran peligro.
—Lo sé. Estoy trabajando en eso.
Zaya entrecerró sus ojos—. ¿Tienes otros planes que no conocíamos? —Miró a Piros cuando no obtuvo la respuesta que quería y el beta real pidió permiso al rey con la mirada—. Estoy segura de que hay algo más en lo que has estado planeando.
—El Reino de Andel acaba de responder a nuestro mensaje, princesa. Han accedido a ayudarnos a derribar al Santo Reino —Piros finalmente explicó en detalle el plan que Zander tenía.
Era un poco complicado y arriesgado, había una gran posibilidad de que el Reino de Andel no quisiera cooperar con ellos, por eso Zander no mencionó nada sobre este plan.
Más aún, el que había estado manejando este asunto era Sebastián, para que no sospecharan de Piros, ni lo descubrieran manejando algo diferente.