—¿Qué serpiente es esa? —Blake observaba la cosa que se deslizaba en la mano de Jared.
Este usuario de magia negra había estado en esta manada desde que regresaron de su fallido intento de derrocar al rey, mientras Vemion había regresado al oeste.
—Serpiente venenosa.
Este hombre había estado criando estas serpientes desde hace un mes y ahora utilizaba su magia negra, creando un portal para enviarlas a algún lugar.
—Son hermosas, ¿verdad? —Jared estaba hipnotizado por la serpiente en su mano, sus ojos brillaban y parecía que iba a besar a cada una de ellas, lo que hizo que el estómago de Blake se revolviera.
Desde que estaba con estos usuarios de magia negra, había tenido dificultades para evitar vomitar.
Simplemente eran asquerosos de la peor manera posible.
—Entonces, ¿has estado esperando un mes para criar esa serpiente? —Blake supuso. Tenía esta habitación llena de serpientes. No quería entrar en esta habitación, a menos que fuera llamado, justo como ahora.