—¿Cómo sabes que cederá con dinero? —preguntó Amanecer, recordó que, además de amar a sus 'bebés', Hécate era realmente una persona orientada al dinero.
Salieron de la casa de Hécate y Piros creó un portal para ellos. Les tomó menos de tres horas conseguir todos los objetos y ahora podían regresar para salvar la vida de Zander.
—Es pobre —respondió simplemente Cenit.
Amanecer se quedó sin palabras. —Eres muy prejuicioso. No sabía cómo reaccionar a eso, ya que esa era la cruda verdad. Cuando eres pobre, todo lo que necesitas es dinero.
—Funcionó.
Cenit no se equivocaba en eso, además, cien mil de oro era una cantidad pequeña que él estaba más que dispuesto a pagar por su hermano. Bueno, ese dinero venía del tesoro del reino, así que no era como si lo hubiera pagado él.
—¿Por qué querías que fuera al palacio?
