—¡Eres una asesina! ¡Igual que como mataste a tu madre, intentaste matar a mi hija también! —Julia lo perdió, estaba gritando, maldiciendo e intentando golpear a Amanecer si no fuera por el Beta Jason, que la sujetó.
Mientras tanto, Ava y Blake trataban de proteger a Amanecer de la ira de Julia.
—¡Te voy a matar! ¡Te voy a matar! ¡Vas a pagar por esto!
—¡Julia! ¡Basta! —Jason la sujetó, usó la voz de beta para someterla, para que no se transformara en su forma de bestia—. ¡Ava, Blake, llévenla de vuelta a la casa de la manada!
Por otro lado, Amanecer no mostraba ninguna expresión, no había remordimiento ni nada por el estilo en su rostro. Parecía estoica, a pesar de que sabía que casi había matado a Emily.
En su ira, Amanecer se había transformado en su forma de bestia y la atacó brutalmente. Las mujeres de esta manada no recibían entrenamiento en combate, pero se podía decir que Amanecer tenía sangre de alfa en sus venas, era feroz en su ataque y Emily estaba indefensa.