Emily observaba a su bebé gatear por el suelo. El pequeño había empezado a decir su primera palabra, que era mamá, pero ella no se sentía emocionada en absoluto. Cuidaba de Arren, pero apenas, lo justo para mantener al bebé con vida.
Alfa Tony tampoco mostraba interés hacia su nieto. No lo trataba mal, pero siempre había esa mirada de disgusto en sus ojos cada vez que veía al bebé.
No hablaban de eso. Era un tema tabú, pero la posibilidad de que Emily fuera hija de Jason era tan alta como que fuera hija de Tony. El pensamiento les daba náuseas, por lo que nunca abordaron el tema y pretendieron que nada había pasado, mientras continuaban con sus vidas.
Hoy, Tony iría al puerto para encontrarse con Celine, la curandera que había sido enviada desde el palacio.