Las calles de Cristal estaban a reventar, Criss caminaba en una de sus intrincadas calles, moviéndose entre sus sombras y escapando de su luz. No podía dejar de moverse, ya que al dejar de hacerlo su identidad sería revelada.
La intención de Criss era salir de la ciudad y esconderse en una ciudad o pueblo menos concurrido, donde nadie pudiera encontrarlo hasta hallar una solución al problema. Su primera idea fueron las ciudades fronterizas con el país de Tina, para que, en caso de no poder resolver la situación, pudiera escapar de Corona y rehacer su vida.
Era su última opción, pero para lograrlo debía salir de la ciudad.
«Estoy agotado, tengo que descansar»
Se paró un momento y tomo un respiro, no había dejado de caminar desde la noche anterior. Cristal no era tan grande, su demora era debido a los controles y policías. No era extraño tanta seguridad, pero el mayor culpable era él mismo. Lo estaban rastreando.
«Si me detengo demasiado, me atraparán, comeré algo y me iré»
Rebusco en sus bolsillos y saco un billete de 10 pesos lunares.
En el país de Corona los billetes se dividían en pesos lunares y solares, los solares equivalían al tripe de los lunares. En su mayoría se utilizaban para transacciones de cambio de efectivo. Pero en el uso diario solo se usaban los lunares.
Salió de un callejón y se dirigió a un carrito callejero.
"En que le puedo servir joven, quiere pasteles de carne o prefiere las arepas rellenas, solo cuestan 5 lunas cada uno"
el dueño levantó la voz con alegría y saco una silla plegable del carro
"gracias, quisiera un pastel de carne. Tome aquí tiene sus lunas"
Criss empezó a disfrutar de su merienda, y converso un poco con el dueño del carrito.
"¿cómo va el negocio por aquí?"
El hombre lo miro y suspiro.
"No nos ha ido mal, aunque apenas y puedo pagar la renta, es difícil para un carrito competir con los locales del centro. Son muy rápidos y buenos, ya nadie viene a comer en este tipo de puestos"
"Me apena escuchar eso"
"No te preocupes, mientras allá gente como tú no habrá problemas. Además, soy un hombre afortunado. ¿Quién sabe tal vez llegue un hombre rico y pida una decena de pasteles?, jajajá"
"tienes razón"
Criss levantó la mano y se despidió del hombre del carrito, no podía demorarse en salir de la ciudad.
Al darse la vuelta para irse pudo ver a un oficial acedarse al carrito, suponiendo lo que sucedería, escapo.
Con su cuerpo mejorado y su comprensión de su peso se equilibró, saltando hacia una pared.
Cuando término de equilibrarse vio pasar al oficial de policía debajo de sus pies.
«Cada vez es peor… necesitó salir lo antes posible»
A diferencia de Ursu y Margarita, él no podía estar al aire libre. Su identidad como un brujo se había descubierto, era por eso que decidió salir de la casa de Ursu.
«Le causaría problemas a esos dos»
Criss tuvo poco contacto con esas dos personas, pero para él les debía su vida. Siendo eso suficiente.
Callo y volvió a dirigir su camino…
En una celda oxidada, Violeta miro con angustia el gran circuló de sacrificio que estaba al frente de ella. El círculo estaba rodeada de collares, armas, anillos, entre otros objetos.
Sus sentidos selo advertían, esta iba a ser su tumba si se quedaba más tiempo. Golpeo y mordió con desesperación las barras de acero, pero fue inútil.
Entonces un grupo de personas apareció. Vestidos con túnicas blancas con decoraciones doradas, se alinearon alrededor del círculo. Sus voces se entrelazaron en un lenguaje extraño que resonaba con la atmósfera circundante.
Ella tenía miedo, no era el típico miedo a algo dañino o desconocido. Era algo peor, un miedo proveniente de sus genes, de su alma, era innato. Algo dentro de ella se revolvió y una voz inundo su cabeza.
«¡¡Escapa, Escapa, Escapa, Escapa!!»
"erhhh, ahhcc, ¿quién me habla?"
Un terrible dolor de cabeza la asalto cayendo en dirección al suelo.
«¡¡Escapa, Escapa, Escapa, Escapa!!»
"¿acaso eres el señor librero?, ¿¡por qué me estás lastimando!?"
Aunque ella no lo sabía, fue arrastrada a un santuario y conoció a su dueño. Lo que causo, no solo su secuestro, sino también su extraña habilidad, ¡se había convertido en un brujo sin contrato!
El que parecía el líder de esta extraña secta camino despreocupadamente hasta estar al lado del centro del círculo. Also sus manos y todas las personas dejaron de cantar en ese extraño lenguaje.
"Nosotros, la nueva inquisición, abogamos por un mundo libre de demonios y aspectos blasfemos. Nosotros solo creemos en algo, nuestra confianza no danza de demonio en dominio, nosotros solo oramos para el colectivo, aquel que mantiene a los repugnantes dominios donde pertenece, el protector del mundo terrenal, el custodio y celda. La llave y la puerta"
Los demás corearon "¡la llave y la puerta!"
"Pero para ello, necesitamos armas capases de matar a estos engendros que invaden nuestro mundo, devolviéndolos a donde pertenecen, entonces rezamos para que con ayuda de un sacrificio demoniaco, para que el colectivo pueda imbuir nuestros cuerpos, armas y encantos para la batalla"
Sus manos bajaron y su mira ascendió hacia el cielo o en este caso el techo.
"Traigan al primer sacrificio"