—Punto de vista de Asher Frostblade.
Sumergida en sus pensamientos, Oriana miró su café por varios minutos mientras Asher observaba su figura frente a él.
"Bien."
Oriana entrecerró los ojos, luego tomó su café y bebió un sorbo, mirándolo nuevamente.
La información proporcionada por Asher...
Oriana la analizó por varios minutos. Había algo peculiar en todo lo sucedido hoy, sobre el colapso de las puertas y demás eventos. Sin embargo, ciertos detalles en la información de Asher destacaban.
El hecho de que la gestión de mazmorras no ofreciera información completa y el colapso repentino de las mazmorras sugería una conexión.
¿Qué más se podía concluir? Había una relación en todo esto. Aun así, no había nada concreto que los condujera a una respuesta inmediata, especialmente porque todo había ocurrido apenas hace diez horas. Por eso, apenas se estaba investigando, y Oriana lo entendía.
Miró a Asher y finalmente habló.
"Hablaremos de la información incorrecta de la mazmorra con los superiores de gestión."
"Bien."
"Oh... Ahora que te observo, estás en el tercer círculo, ¿verdad?"
Como si ya esperara esa pregunta, Asher respondió:
"Bueno, algo imprevisto ocurrió mientras estaba en la mazmorra."
"¿Imprevisto? ¿Qué sucedió además de lo que ya me dijiste?"
"Verás..."
Asher procedió a explicarle todo lo que pasó con su otra personalidad. La mazmorra contenía elementos inusuales, como una niebla que atacaba mentalmente, lo que hizo que Asher perdiera el control y emergiera una nueva personalidad.
Esto era crucial para que su "Maestra" lo supiera, dado el estado actual de Asher. Oriana no mostró ninguna emoción, pero quedó sumida en sus pensamientos, ya que lo que Asher le reveló era bastante grave.
"Bien... Estamos en problemas", habló finalmente, porque era cierto.
La próxima vez, Asher quedaría completamente sellado dentro del espacio en blanco, y su otra personalidad tomaría posesión de su cuerpo de forma permanente.
Asher había bautizado a esta personalidad como "Corrupción", ya que era una versión retorcida, lo opuesto a él, corrupta en todos los sentidos. Sus acciones y pensamientos eran extraños, incluso psicopáticos. Lo más preocupante era que, si esa personalidad regresaba, intentaría matar a los amigos de Asher, tomando el control completo de su cuerpo.
"Pero... ¿Cómo volviste?"
Omitió mencionar que Gloriana, con su afinidad, había facilitado el regreso de Asher. Sin embargo, pensó en decirle a Oriana sobre la afinidad de Gloriana.
Es verdad que Gloriana era hermana de Oriana, pero Gloriana querría revelar su afinidad por sí misma. Asher decidió calmarse, pensando por un momento si debía o no mencionarle a Oriana la afinidad de su hermana.
Asher poseía una afinidad nunca antes vista, con habilidades desconocidas. Aunque muchos ya sabían sobre la magia oscura que él utilizaba, nadie conocía el verdadero nombre o naturaleza de su afinidad, por lo que lo mantenían bajo constante vigilancia.
"Haaa... No lo sé."
Asher habló.
"…"
Oriana frunció el ceño ante la respuesta de Asher. Un simple "No lo sé" era, por supuesto, una respuesta sin sentido.
Oriana pronto habló con un tono más serio.
"Dime, ¿cómo te recuperaste? Si me lo dices, quizás pueda ayudarte."
"Porque no lo sé yo tampoco", respondió rápidamente.
Asher tampoco entendía por qué la afinidad de la luz lo había hecho regresar y tomar control de su cuerpo, mientras que su otra personalidad fue sellada temporalmente.
"Tampoco lo sabes... No parece una mentira."
Oriana podía leer expresiones faciales, emociones, latidos del corazón y nerviosismo con facilidad. Viendo que Asher no mostraba ninguna de estas señales, supo que decía la verdad.
"Ya veo."
Sin embargo, era inevitable. Asher no sabía cómo había regresado, pero ella sospechaba. Había algo extraño en todo esto, y ciertamente, Asher estaba ocultando algo. Por eso, Oriana frunció el ceño aún más.
"Dime el resto."
"…"
Asher se quedó desconcertado, pensando que la conversación terminaría ahí. No esperaba que ella insistiera más, aunque no le sorprendía del todo.
"¿Qué…?"
"Asher, tu comportamiento y todo sobre ti está en mis manos. Eres mi discípulo, y te conozco desde hace 15 meses. Por eso, como tu.... tutora, dime lo que estás ocultando."
"…"
No pudo decir nada, porque ella tenía razón. Oriana conocía bien a Asher: sus acciones, sus pensamientos, sus emociones, todo.
Pronto, Oriana frunció aún más el ceño.
La reacción de Asher le confirmó definitivamente que él le estaba ocultando algo. Sin embargo...
"No eres alguien cercano a mí... ¿Por qué debería decirte todo?"
"…"
Oriana quedó atónita. Las palabras de Asher la tomaron por sorpresa.
"Esa actitud... es diferente", pensó.
Quizás era una consecuencia de su otra personalidad. Posiblemente esa otra faceta de Asher le había dejado algún efecto secundario. Aun así, el problema era evidente: las palabras de Asher habían enfurecido a Oriana por un momento.
"Está bien... Es verdad, no soy nada para ti, y mucho menos alguien cercano. Solo somos conocidos, nada más", dijo Oriana con enojo.
"…"
Aunque Asher también frunció el ceño, él también se sentía molesto.
"Bien, entonces no preguntes. No sabes nada de mí, igual que yo no sé nada de ti."
Esta situación planteaba una pregunta: ¿por qué Oriana había tomado a Asher como discípulo en primer lugar?
"¿Por qué soy tu discípulo?"
"…"
Oriana no supo qué responder de inmediato.
"Es verdad...", murmuró.
Ella también se lo había preguntado a sí misma en su momento. Todo comenzó como una retribución, ya que Asher había salvado a Gloriana en el pasado, protegiéndola mientras varios caballeros no pudieron hacerlo.
"Suficiente", dijo Oriana, visiblemente molesta.
Su rostro se tensó aún más, las venas en su frente mostrando signos de creciente enojo debido a las palabras descaradas de Asher.
Sin embargo, Asher se mantuvo distante, con una expresión calmada y severa, sin ninguna fisura en su postura.
"Haa... Ahora estás discutiendo conmigo... Bien", dijo ella, frotándose la frente con frustración.
Oriana había intentado entablar una conversación tranquila, pero todo había tomado un mal rumbo debido a las primeras palabras de Asher.
"Empecemos de nuevo, ¿entendido?"
"Bien."
Ambos acordaron. Sabían que si se distanciaban, las cosas se volverían problemáticas para ambos.
"Como decías, es verdad que ni siquiera debí preguntarte nada que no quisieras decirme."
"Porque no eres nadie para mí... Estoy acostumbrado a estar solo."
"…"
Las palabras de Asher dejaron a Oriana visiblemente afectada.
"Solo..."
Esa palabra resonó en su mente, y Oriana se hizo una pregunta.
"Asher, ¿no recuerdas a tu familia?"
"¿Por qué debería? No tengo memoria de ello, ni siquiera sabía mi edad o fecha de nacimiento hasta hace unos días."
"…"
Oriana lo miró con inquietud.
Eso despertó más preguntas en su mente, hasta que, de repente...
"Uh..."
Oriana se giró, ya que alguien había puesto una mano en su hombro. Al volverse, vio a una mujer de aspecto similar al suyo, pero con cabello negro azabache y ojos rojos, iguales a los de Oriana.
Sabía quién era esa mujer, así como su estatus en la academia y en el reino, y su fuerza.
"Briana, ¿sucede algo?"
Oriana miró a la mujer y mencionó su nombre mientras fruncía el ceño. Briana la observaba con una sonrisa.
Luego, Briana miró a Asher y le dedicó una sonrisa, pero él sintió algo extraño.
"¿Qué demonios...? Siento que la he visto antes."
Era una sensación familiar, como si Briana fuera alguien que Asher conocía, pero al mismo tiempo no.
"No... no sé nada."
Su mente comenzó a dar vueltas. No tenía idea de quién era esa mujer, pero su presencia le resultaba extrañamente familiar.
"Vine a decirte que el director llamó a todos los profesores a una reunión urgente", dijo Briana.
"Oh."
Oriana asintió, se levantó y miró a Asher por última vez.
"Debo irme."
"Bien."
Ambos se despidieron. Sin embargo, antes de marcharse, Briana se dirigió a Asher.
"¿Eres el discípulo de Oriana?"
"…"
Asher la miró seriamente. Briana también era profesora, pero nunca antes la había visto en la academia o en las clases. Aun así, sabía que lo era.
"Sí", respondió Asher.
"Entiendo. Debo irme también..."
Briana desvió su mirada un instante, luego lo miró directamente a los ojos, sonriendo de repente.
"Veo que eres del tercer círculo."
"Lo soy."
Asher daba respuestas rápidas y cortas, ya que desconfiaba de ella. Algo en Briana lo inquietaba, como si su presencia le resultara familiar, igual que esa mujer desconocida que siempre lo visitaba.
Pero...
"Su voz es diferente a la de la mujer desconocida... Quizás solo me lo estoy imaginando."
Asher se cuestionaba, tratando de calmarse.
"Bueno, adiós, cadete", dijo Briana.
Pronto, alcanzó a Oriana y ambas se marcharon. Asher observó la espalda de Briana por un momento y luego frunció el ceño.
De repente...
"Haa... haa... haa..."
Sintió su pecho subir y bajar con fuerza, su respiración se volvió irregular, y empezó a sudar frío.
"Mierda... Esto..."
No sabía qué decir, pero una sensación asfixiante lo envolvió de pronto.