Después de dos días, los cuatro participantes fueron llamados de nuevo y se les colocó dentro de la sala. Se les dio una hoja de papel con cincuenta preguntas relacionadas con la Manada y todo el reino.
Felissa quería conocer su capacidad de conocimiento ya que era necesaria para ayudar a liderar la Manada. Ella tomó la responsabilidad de los exámenes mientras dejaba que Vicenzo se encargara del siguiente.
Ha pasado una hora desde que comenzó el examen y Felissa ya podía ver a Guff y Elio teniendo un colapso mental. Natan estaba mirando por la ventana y solo Luca se concentraba en obtener respuestas correctas.
Después de treinta minutos más, Felissa entró en la sala. Se colocó en el centro y levantó el brazo. —El examen ha terminado. Por favor, procedan a la puerta trasera de la Casa de la Manada —dijo sonriendo.
Felissa comenzó a recoger sus papeles ya que ella los revisaría personalmente.