Vicenzo miró la espalda de Felissa. Habían pasado dos días desde entonces, y todos se estaban preparando para la siguiente Prueba. Ella estaba ocupada trabajando para asegurarse de que todos estuvieran mucho más seguros esta vez.
—¿Vas a quedarte mirándola hacer todas esas cosas? —Vanda apareció y susurró al lado de Vicenzo.
Vicenzo se sobresaltó ya que no había sentido en absoluto la presencia de la Señora Vanda. La miró con el ceño fruncido.
—Señora Vanda, ¿puedo preguntar qué quiere decir con esa pregunta? —Vicenzo dijo en voz baja.
Vanda cruzó su mano y le hizo un gesto a Vicenzo para que la acompañara. Se giró y se fue sin esperar la respuesta de Vicenzo.
Los ojos de Vicenzo se abrieron de par en par cuando miró de un lado a otro entre Felissa y Vanda. Finalmente, informó a Vinicio de su ausencia y decidió seguir a Vanda.
Fueron más adentro del jardín cercano donde estaban solos.