Todas las miradas se dirigieron a Xaden ahora que Jazmín había dicho que él era lo último que vio antes de desmayarse
Nadie dijo nada en absoluto.
Luego, las cosas empezaron a aclararse para Jazmín.
—¿Qué... ehmmm... Creo que puedo recordar estar con Fiona. —Jazmín se giró para ver a Fiona de pie frente a ella—. ¿Y luego estábamos en el lago, creo?
—Sí, así es. —Fiona asintió en acuerdo.
—Está todo nebuloso. —Jazmín dijo lentamente tratando de unir las piezas.
—No necesitas preocuparte por detalles tan aburridos. Necesitas descansar. —dijo Xaden.
Pero Jazmín continuó. —Y entonces llegó Aurora.
Todos se detuvieron.
—¡Ella vino a mí como un lobo! ¡Lana! —Jazmín exclamó—. La niña estaba allí con nosotros. ¿Dónde está ella?!
—Lana está bien. —Fiona la aseguró—. Todo está bien. Lana está en buenas manos.
Jazmín suspiró aliviada. —Gracias a los dioses.
—¿No recuerdas nada más? —Fiona insistió.
Xaden la miró fulminante y ella cerró la boca.