Todd cogió el teléfono y vio que había un número programado en él. —Supongo que si me meto en problemas puedo llamar a este número, ¿me ayudarás?
—Sí, ahora eres mi responsabilidad. Ha sido un día bastante largo. Me retiraré a mi habitación y Royce te mostrará la tuya —Cedric se levantó y se abrió la puerta.
—Cuidaré bien de nuestro nuevo trabajador. Soy Royce, el mayordomo jefe aquí. He trabajado aquí toda mi vida y te enseñaré cómo hacer las cosas. Soy humano como tú —Royce se marchó.
Todd se apresuró y siguió a Royce por la casa para hacer el recorrido.
Cedric se levantó, volvió al dormitorio y cerró la puerta silenciosamente. Entró en la habitación tratando de no perturbar el sueño de Yuki. Se cambió de ropa, la tiró a un lado y se metió en la cama.
Yuki se giró y se acurrucó junto a Cedric. —¿Ya está todo resuelto?
—Lo siento, ¿te desperté? —Cedric la atrajo hacia él para que estuviera cómoda—. Todo está resuelto. Me quedaré con uno y el otro está siendo torturado.