—Uakk... —La sangre salpicó de su boca antes de que Qigang cayera al suelo.
—¿Por qué? ¿Por qué siempre fallo al golpearlo? Desde que luchamos, siempre consigue golpearme, pero lo mismo nunca me sucede a mí. ¿Por qué? —Qigang no podía creer lo que le estaba sucediendo. Era un artista marcial en la etapa de maestro de alto nivel, por lo que no creía que no pudiera golpear a Xiao Tian ni una sola vez.
Aunque había perdido varias peleas, esta era la primera vez que siempre fallaba al atacar a su oponente. Algo así nunca le había sucedido antes. Cada vez que perdía una pelea, su enemigo también quedaba gravemente herido.