—¿Qué estás haciendo? —preguntó Ye Qingyu cuando vio a Xiao Tian quitándose la camiseta.
—¿No quedamos en dormir desnudos juntos? —respondió Xiao Tian al instante—. Vamos, quítate la ropa.
—Tian, no podemos hacer eso. Si de verdad quieres hacerlo conmigo, vámonos al hotel ahora —Ye Qingyu pensó que Xiao Tian deseaba tener sexo con ella y que dormir desnudos era solo su excusa.
Xiao Tian de repente pensó que era el momento adecuado para burlarse de ella —Claro. Vamos al hotel ahora. También creo que es mejor hacerlo en un hotel que aquí.
—Déjame cambiarme primero —Ye Qingyu se levantó de la cama y caminó hacia el armario.
Sus acciones sorprendieron bastante a Xiao Tian. Antes, pensaba que Ye Qingyu no aceptaría tan rápido.
—Parece que realmente hará lo que yo quiera.
Xiao Tian se acercó a ella y la abrazó por detrás.
Ye Qingyu, que estaba eligiendo ropa, detuvo lo que estaba haciendo —Por favor, ten paciencia. Podemos hacerlo todo lo que quieras después.
