La expresión de Ye Xueyin se volvió instantáneamente feliz cuando vio a Xiao Tian haciéndole señas para que se uniera a ellos. Incluso le indicó que podía chupar su enorme polla erecta.
Antes, cuando se estaba dando placer a sí misma, también deseaba chupar y lamer su enorme polla. Incluso imaginó su dedo corazón izquierdo, que se movía dentro y fuera de su coño húmedo, como si fuera su polla.
Ahora que había surgido la oportunidad de chupar su polla, no la dejaría escapar. Claro, Ye Xueyin sabía que su idea era peligrosa.
Sin embargo, estaba segura de que mientras Xiao Tian estuviera cerca, todo estaría bien.
—Glup…
Ye Xueyin no pudo evitar tragar saliva cuando vio la polla de Xiao Tian erguida poderosamente como si su pene desafiara al cielo.
«Ahhh… su polla se ve tan deliciosa. Quiero chupar y lamer su pene inmediatamente».
Con eso en mente, Ye Xueyin quería entrar en la habitación de Shi Fei.
