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La expresión de profundo asombro surgió en los rostros de Liu Ning, Lin Xing Xue, Ye Qingyu y Ye Xueyin. No esperaban que Yun Xin Er dijera algo así. Como aún no estaban cerca de Yun Xin Er, no conocían su personalidad.
En cuanto a Shi Fei, solo se rió —jeje—.
—El hermanito es increíble. Parece que puede hacer cualquier cosa.
Por el comportamiento de Yun Xin Er, Shi Fei sabía que Xiao Tian había conquistado el corazón de Yun Xin Er. Aunque no tenía idea de por qué Yun Xin Er aún no accedía a ser su mujer, Shi Fei estaba segura de que tarde o temprano, Yun Xin Er caería en sus brazos.
—¡Uy! —Yun Xin Er se tapó la boca. Acababa de darse cuenta de lo que había dicho. Sin embargo, no intentó corregir sus palabras y solo se tapó la boca.
—¿Ya lo hicieron? ¿Fue un beso normal o uno apasionado? —Shi Fei preguntó con curiosidad.
