—Ah... —Shi Fei sintió su coño lleno cuando la polla de él estaba dentro de su vagina—. Mi coño extraña tanto esta sensación.
—Mi polla también extraña tu vagina mucho —tal vez porque no habían tenido sexo por más de una semana, Xiao Tian sintió que su coño estaba mucho más apretado que de costumbre.
La forma en que los músculos de su coño apretaban su polla era más salvaje que de costumbre. Era como si su coño hubiera estado esperando por su polla todo el tiempo.
En este momento, ninguno de los dos movía sus cuerpos. Aún querían disfrutar de la sensación de sus cuerpos estando conectados.
Xiao Tian puso su dedo medio y índice derecho frente a su cara y habló:
—Lámelo.
Porque Xiao Tian quería que lamiera sus dedos, Shi Fei inmediatamente hizo lo que se le decía. Abrió su boca pequeña e introdujo en su húmeda boca su dedo medio e índice.
Shi Fei lamió hábilmente sus dedos y los trató como si fueran el caramelo más delicioso del mundo.
