—Guau. Se ve delicioso. —Los ojos de Shi Fei brillaron intensamente cuando vio la sopa.
La sopa que Xiao Tian cocinó sí se veía sabrosa como si estuviera hecha por un chef profesional.
—Cómetela. —Xiao Tian sonrió feliz cuando vio la expresión de Shi Fei.
Xiao Tian de repente quería que Shi Fei y Liu Ning probaran la sopa enseguida para poder escucharlas elogiar sus habilidades culinarias.
—Un. —Shi Fei probó la sopa al instante sin pensarlo dos veces.
Mientras Shi Fei comía la sopa, una expresión complicada surgió en el rostro de Liu Ning cuando estaba a punto de comer la sopa.
En ese momento, Liu Ning todavía pensaba que la sopa sabría a veneno porque cada vez que Xiao Tian cocinaba algo para ellas, siempre fallaba en preparar comida sabrosa.
Sin embargo, porque no quería herir sus sentimientos, Liu Ning decidió probar la sopa.
—Mm? —Una expresión de profunda sorpresa surgió en la cara de Liu Ning cuando probó la sopa.