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Treinta minutos habían pasado desde que Xiao Tian se quedó dormido en el regazo de Liu Ling. Poco después de eso, Xiao Tian despertó.
Xiao Tian se sorprendió cuando se dio cuenta de que su cabeza estaba en el regazo de Liu Ning. De repente se sintió afortunado de que Liu Ning fuera quien lo viera durmiendo en el sofá.
Si sus otros empleados lo hubieran visto durmiendo en el sofá, podría haber perdido la dignidad. Xiao Tian tampoco esperaba quedarse dormido mientras se relajaba en el sofá. Esto hizo que Xiao Tian se diera cuenta de que debería relajarse en el dormitorio la próxima vez que estuviese cansado.
Aunque Xiao Tian estaba despierto, Liu Ning no dejó de acariciar su cabello. Incluso sonrió bellamente mientras lo miraba. —¿Dormiste bien?
—Un. ¿Cuánto tiempo he dormido en tu regazo? —Xiao Tian no se sentó de inmediato en el sofá; en cambio, continuó descansando en su regazo.