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Cuando Ye Qingyu entró en la sala VIP, una hermosa sonrisa apareció en su rostro. Los aromas florales la hicieron sentir relajada, y la luz amarilla colgando de la pared se veía tan hermosa en sus ojos.
Cuando Xiao Tian vio la expresión en su rostro, preguntó de inmediato —¿Qué te parece? ¿Te gusta?
—Sí —Ye Qingyu asintió con la cabeza.
La camarera se marchó inmediatamente después de apuntar su pedido. Xiao Tian y Ye Qingyu conversaron durante varios minutos antes de que, finalmente, la camarera entrara en la sala y pusiera su pedido sobre la mesa.
Previamente, Xiao Tian había pedido una ensalada de pollo con té de limón, mientras que Ye Qingyu había solicitado mariscos sal y pimienta con té de limón.
—No esperaba que conocieras un lugar como este —dijo Ye Qingyu, quien estaba sentada a su lado derecho.
—Este es el café del que te hablé antes —Xiao Tian le respondió sinceramente.