Después de que Xiao Tian llegó a casa, se sintió un poco decepcionado cuando no vio a su madre y a su tía en la sala de estar.
—Ya son las 23:58, quizás estén durmiendo.
Porque pensó que su madre y su tía estaban durmiendo, Xiao Tian se dirigió a su habitación. Inmediatamente se durmió porque ya no había nada más que hacer.
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A la mañana siguiente, Ye Xueyin, que acababa de despertarse, se apresuró hacia la habitación de su hijo. Se rió alegremente cuando vio a su hijo durmiendo profundamente.
Porque anoche no pudo pasar tiempo con él, Ye Xueyin se tumbó boca abajo encima de su cuerpo.
Xiao Tian, que estaba durmiendo, abrió lentamente los ojos cuando sintió a alguien acostado sobre su cuerpo. Su rostro se iluminó con una sonrisa cuando supo que su madre estaba encima de él. —Xueyin, ¿quieres dormir conmigo?
—Sí. Madre quiere dormir contigo —Ye Xueyin hizo círculos en su pecho con su dedo índice izquierdo.
