Después de gozar actividades ilícitas y placenteras por largo tiempo, decidieron parar y darse una ducha juntos. Xiao Tian llenó la bañera con agua tibia antes de entrar juntos en la tina.
—Ah... Bañarse con agua calientita es lo mejor —Ye Qingyu, quien estaba sentada en los brazos de su sobrino, recostó su cabeza en sus hombros.
Xiao Tian inmediatamente rodeó su cintura con su mano y besó suavemente sus hombros, —Sí, bañarse con agua tibia después del sexo es lo mejor.
—¡Pervertido! —Ye Qingyu sonrió mientras pellizcaba sus mejillas.
Xiao Tian besó las mejillas de su tía antes de responder, —Pero es la verdad.
—Sí, sí. Todo lo que dices siempre es la verdad —dijo Ye Qingyu.
Xiao Tian, que veía los hermosos senos de su tía, de repente deseó apretarlos. En realidad, solo quería bañarse con su tía, pero la vista de sus encantadores senos era demasiado tentadora como para contenerse de hacer algo más. Por eso, de repente apretó sus pechos suavemente.