Lance escuchó lo que Huanhuan dijo.
Se detuvo, sus ojos esmeralda mostrando sorpresa antes de oscurecerse.
Resultó que ella ya tenía un esposo.
Sin decir otra palabra, Lance caminó solo para sentarse bajo la sombra de los árboles distantes.
Huanhuan volvió a dormir y no notó la anormalidad de Lance, pero Elman sí lo hizo.
Se acercó a Lance y se sentó. —No estés triste —lo consoló—. Hay muchos peces en el mar. Con tus calificaciones, definitivamente habrá muchas chicas geniales esperando salir contigo en el futuro.
Lance frunció el ceño. —No entiendo de qué estás hablando.
—Huanhuan no está destinada para ti. Supéralo.
—¿Qué tiene que ver ella? ¡No me gusta!
Elman asintió. —Sí, no te gusta ella, y ella no te gusta a ti. Solo son amigos.
Lance: "…"
¡Ahora estaba aún más enfadado!
Fue toda culpa de Huanhuan por seducirlo a propósito. Le hizo cosquillas en el corazón. Cuando realmente quería hacer algo, ella soltó una bomba y dijo, 'Ya tengo marido e hijos'. Lo dejó atónito.