Blake continuó su camino hasta llegó a un pueblo, este era bastante grande, pero muy tranquilo, las calles eran silenciosas pues se podían ver pocos vehículos circulando, tampoco habían muchos transeúntes en las aceras.
Blake cambió su vestimenta usando sus extrañas habilidades, los poderes de Blake le permitían hacer prácticamente todo.
La vestimenta que usaba anteriormente se asemejaba a un traje especial de color negro solo que no llevaba casco, la nueva ropa era una camiseta color negro y pantalones del mismo color, añadido a esto usaba zapatos color blanco.
Haciendo uso de su Sentido adivinador Blake comenzó la búsqueda del misterioso chico.
La FMT se esforzó mucho en encontrar al extraño ser, pero debido a sus limitaciones les fue imposible encontrarlo y finalmente se rindieron, aún así mantenían la vigilancia día y noche con la esperanza de encontrarlo.
El informe de lo sucedido le fue otorgado al comandante general de la FMT, el cual era un veterano de guerra llamado Yuki, un soldado japonés que estaba en la unidad desde su fundación en el año 2000.
—Debemos esperar lo peor, según los informes Caskein tiene que ver con el imperio Far por lo que si él está aquí significa que somos el objetivo del imperio. —Le dijo Yuki a uno de sus subordinados mientras leía el informe.
—Pediremos apoyo a Mundo Cero. —Dijo un hombre que estaba en sala este era el segundo al mando.
Tal y como lo habían dicho enviaron mensajeros a Mundo Cero para pedir la cooperación militar de estos.
Mundo Cero es un planeta a las afueras del sistema solar hay al menos dos estrellas entre la Tierra y Mundo Cero.
Mundo Cero tuvo una gran participación en la fundación de la FMT y los apoyo militarmente cuando el imperio Far invadió la Tierra en el año 2000.
El imperio Far es la fuerza militar más grande del universo, aun así sufrieron una humillante y denigrante derrota cuando trataron de invadir la Tierra por lo que un segundo ataque solo tendría un mensaje "Venganza".
Esta situación llenaba de preocupación a los altos rangos de la FMT pues sabían que antes no habían luchado con todo.
Mientras todas estas situaciones sucedían por las calles de aquel pueblo en donde se encontraba Blake caminaba un chico su nombre Carlos Philips.
Carlos era un niño de 11 años recién cumplidos, tenía cabello negro y este era corto, era delgado y de piel morena, y el color de sus ojos era cafés.
Este pequeño niño que no parecía tener nada de especial es más parecía ser un vagabundo era la persona que Blake estaba buscando.
Cuando caminaban por las calles Blake y Carlos se encontraron, al conocer a Blake Carlos no le presto atención alguna para el era una persona más, pero Blake no pudo ignorarlo, este pequeño niño de apariencia inofensiva definitivamente emanaba energía divina, aquella que le otorgaba sus habilidades.
Blake trató de hablarle, pero ya era demasiado tarde Carlos había entrado en un callejón.
Mientras Carlos caminaba este se encontró con varios chicos de unos 14 a 16 años.
—Hola Carlitos, porque no lloras como niño cobarde como lo haces siempre. —Dijo uno de ellos.
—Dejen de hablar de cosas que jamás pasaron. —Dijo Carlos de manera inexpresiva y continuó su camino sin prestarles atención.
—¿Te estás burlando de nosotros? —Dijo otro de los chicos mientras lo sostenía del hombro para detenerlo.
— Y si eso hago ¿Qué? —La mirada de Carlos era seria y amenazante.
El tercero de los atacantes sonrió debido a las palabras de Carlos y sin decir alguna palabra este le lanzo un golpe al estómago de Carlos.
Carlos solamente usó su mano izquierda para bloquear el ataque, lo cual logró sin mucho esfuerzo.
Al ver esto el segundo de los chicos le soltó el hombro y le lanzó un golpe a la cara, Carlos movió su cabeza hacia atrás para evitar el golpe.
El primero atacó rápidamente, pero Carlos esquivaba muy bien los ataques.
Entre tanto esto pasaba Blake observaba atentamente la pelea sin intención de intervenir al menos el combate no le daba una sensación de necesitar intervenir esto a pesar de que eran tres contra uno.
La pelea terminó cuando los adolescentes se dieron cuenta de la presencia de Blake, al verlo se retiraron del lugar.
Cuando se fueron Blake se acercó a Carlos.
—¿Estás bien muchacho? Eso fue increíble. —Dijo Blake sonriendo.
—Si, estoy bien. –Dijo Carlos un poco enojado mientras continuaba su marcha.
—Espera. —Blake hizo señas para que se detuviera. —No te enojes conmigo, creo que no eres muy amable muchacho. —Carlos se detuvo.
—¿Por qué tendría que ser amable contigo? Eres un desconocido, jamás he tenido buenas experiencias con los desconocidos. —Carlos comenzó a caminar.
–Espera. –Nuevamente Blake le pidió que se detuviera. —Al menos permite que nos conozcamos. —Carlos acepto a regañadientes.
Esto sucedía en la Tierra, en el espacio sucedían otras cosas interesantes más exactamente en Far.
En el planeta aterrizaba una nave y un soldado de alto rango del imperio bajo de ella, este era Genios.
Genios era un alguien entre los 20 a los 30 años de estatura promedio con musculatura promedio, tenía el cabello corto y color castaño.
Un muchacho llamado Dark, este era un muchacho de entre 20 a 25 años.
Dark era alto delgado y de piel blanca y cabello rubio.
—Llévame con el emperador. —Ordeno Genios con autoridad.
—Eres muy presumido para ser un simple soldado, uno que solo tiene suerte.
—Y tú eres muy presumido para ser solamente la mascota que el emperador rescató.
Estas palabras molestaron grandemente a Dark.
—Como veo que no estás en condiciones para llevarme con el emperador me marcho. —Después de decir esto Genios fue hacia su habitación.
—Espera. —Dijo Dark reteniéndolo antes de que se fuera de su vista. —El emperador me ordenó que te dijera que te prepares pues pronto atacaremos la Tierra. —Ante estas palabras Genios solo sonrío y continúo su camino.
Genios entró en su habitación y está era simple, tenía una cama pequeña un espejo y un armario para su ropa y un segundo armario para objetos como armas, el último complemento de su habitación era una mesa pequeña.
Al entrar en su habitación Genios se quitó la ropa y en su abdomen se podían notar dos cicatrices.
Genios se comenzó a tocar las cicatrices mientras se reía, pues estas las había obtenido durante la misión fallida de conquistar la Tierra.
—Pronto volveré a ese divertido lugar. —Decía continuaba tocando sus cicatrices y seguía riendo.
Cambiando de escenario podemos ver a Caskein sentado mientras lanza y atrapa pequeñas rocas, esto lo hace como método de distracción.
Caskein es un chico de 25 años de cabello negro erizado y corto su piel es blanca, su característica más distintiva es la enorme cantidad de cicatrices en su brazo izquierdo.
—Parece que el destino nos volverá a juntar. —Dijo Caskein mientras continuaba su juego con las piedrecitas.
De vuelta en la Tierra Blake continua su plática con Carlos.
—¿Tienes hermanos? —La pregunta no agrado para nada a Carlos.
—¿Acaso investigas a tu próximo objetivo?, haces demasiadas preguntas y eso me parece sospechoso. —Carlos se detuvo al hacer la pregunta y miro seriamente a Blake.
—Tranquilo no te pongas así, es solo que ¿Cómo puedes dejar de ser desconocido de
alguien si no sabe nada de ti?
—A mí no interesa conocerte. —Dijo Carlos con cierto tono de molestia.
—Pero a mí sí. —Después de esto Blake comenzó a hablar consigo mismo. —La verdad ya sé todo sobre ti, pero me gustaría que me lo dijeras tu mismo.
Después de incómoda discusión continuaron su marcha.