Ciudad Gonzalez, oficina del edificio Estrella Roja.
—¡Allen, sube aquí!
Benjamín Abbott encendió un cigarrillo y se reclinó en su silla, fumando en silencio.
—Dudu...
El teléfono solo emitía un tono de marcación, pero la llamada nunca se realizaba.
¡Mierda!
Golpeó el escritorio con su puño, su tez se oscurecía cada vez más.
Observando la escena de Ives Abbott siendo humillada en su teléfono, no pudo evitar que se le torciera la boca.
Sin embargo, tras recibir este video, no pudo contactar a ninguno de ellos.
—Hermano mayor, ¿me llamaste?
Momentos después, un hombre con una cicatriz en la cara entró en la oficina de Benjamín Abbott.
Tenía un aire de ferocidad natural y también era bastante corpulento.
—Allen, mi sobrina fue golpeada en Ciudad Gonzalez. ¿Reconoces este lugar?
Benjamín Abbott apagó su cigarrillo en el cenicero y casualmente empujó su teléfono hacia Dominic Leocadia.
—¿Quién tiene tanto descaro? ¡Atreverse a ofender a la familia Abbott!