El sol acababa de salir.
Julio Reed se vistió y, siguiendo la dirección proporcionada por Beckett Carmichael, se dirigió a buscar a Santiago Carmichael.
El anciano era terco por naturaleza; después de estar unas horas con la familia Carmichael, se fue de prisa.
Mientras salía, Beckett Carmichael le metió una tarjeta en la mano.
Que el viejo señor Carmichael también rechazó.
Aunque estaba desesperadamente necesitado de dinero.
Según Beckett Carmichael, después de que Santiago Carmichael le diera la pastilla a la anciana, su salud mejoró considerablemente.
Cuando regresaron al hospital para un chequeo, incluso los médicos lo llamaron un milagro.
Esto hizo que el viejo señor Carmichael se sintiera mucho más joven de repente.
Su ánimo también se había levantado un poco.
Por la mañana.
Dos noticias inquietaron la capital.
Fernando Lee explotó durante la cremación debido a un fallo del equipo.
Aunque no hubo víctimas, los restos de Fernando Lee fueron completamente destruidos.
