—Julio Reed, ¿no eres muy capaz? ¡Ve a salvarlos! —En la sala privada de Llegada Oriental de la Niebla Púrpura.
Fue mientras Quella Radcliffe y Julio Reed estaban comiendo.
Damien Leopold empujó la puerta y entró.
Se veía ansiosa, corriendo directamente hacia Julio Reed y jadeando:
—¡Rápido! ¡Ve a salvarlos!
—¿Salvarlos? —Quella Radcliffe giró la cabeza con algo de confusión y preguntó:
— ¿Salvar a quién?
¿No habían salido Damien Leopold y Darnell Ridge justo ahora?
¿Podría ser que habían vuelto para buscar problemas con ella?
—A tu tío y a Dominick los han capturado, y oí que podrían haber sido golpeados —exclamó Damien Leopold urgentemente—. ¡Julio Reed, acaso no conoces a Itai Huntington? ¡Por favor, ve a ayudar!
Cuanto más hablaba, más ansiosa se volvía.
Había oído los gritos dentro de la habitación, claros y distintos.
Cuanto más se retrasaran, más sufriría Cooper Ridge.