Julio Reed confió plenamente el interrogatorio de Janet Carmichael a la Red Widow (Viuda Roja).
Esta última había experimentado torturas inhumanas desde que era niña y había tenido la suerte de sobrevivir entre cientos de niños, por lo que sus métodos eran naturalmente efectivos.
Además, con años de vida en la huida, no era una tarea difícil para ella sacar información de Janet Carmichael.
El Grupo Willson ya había sido encaminado en la dirección correcta, y Julio Reed ya no necesitaba preocuparse por nada.
Lo más importante es que, durante su estancia en la Provincia de Cinco Ríos, el espadachín occidental Lucan Davenport había llevado a sus hombres a exterminar a todos los Guerreros Sombra que los seguían.
Aparte de unas pocas organizaciones antiguas de Guerreros Sombra que seguían vigilando, nadie dentro de la lista de recompensas se atrevía a aceptar las ofertas de Julio Reed.