La llamada Formación de los Cuatro Símbolos no era más que una estrategia deducida de la Habilidad Extraña, analizando las direcciones en las que el sitiado podía esquivar y luego, en base a estas posibilidades, organizar específicamente a discípulos jóvenes para que complementaran el ataque, en coordinación con Maurice Springs para matar al oponente.
No solo Maurice Springs era experto en artes marciales, sino que también estudiaba a menudo estas Habilidades Extrañas.
Desafortunadamente, muchas de estas eran en efecto los "sedimentos" dejados casualmente por Julio Reed.
Pero incluso estos sedimentos fueron considerados tesoros por otros más tarde.
—¡Aún te subestimé! —una expresión seria apareció en el rostro de Maurice Springs, ya que no había esperado perder un discípulo tan temprano en la batalla.
—Esto es normal, si conocieras mi fuerza, quizás ni siquiera te atreverías a pensar en venganza —Julio Reed se volvió, los miró y con un feroz pisotón.