—¿Tiene que ser así? Quiero decir, ¿no puedes simplemente decirles que te gusto
—¡NO! —Ariana se negó tan bruscamente que Nicolai se bajó de la cama—. La miró con una expresión atónita en su rostro.
—Ni siquiera me dejaste terminar lo que quería decir.
—Sé lo que ibas a decir, Nicolai, y la respuesta es no —afirmó Ariana con un atisbo de pánico en sus ojos—. Pensó en su pasado y el presente y de repente se sintió sofocada. Toda su vida estaba llena de manchas, y no quería perder también a Nicolai.
Si les contaba a sus padres, intentarían alejarla de Nicolai, Ariana aún no estaba lista para esa conversación.
No con ellos, ni con Nicolai.
Se sentía disgustada por su propia piel; ¿cuáles eran las probabilidades de que Nicolai no sintiera lo mismo? Estaba con ella porque sentía que era intocada, sin manchas. ¿Qué pasaría si Nicolai descubriera que la mujer que adoraba estaba desde hace tiempo manchada?
