Violeta miró de Jack a Lance y se arriesgó a echar un vistazo a los demás miembros para ver si estaban igual de asustados que ella.
No se imaginaba que se encontrarían con tantos de ellos allí.
No debería estar bien. Tal vez Lance se equivocaba cuando sugería que los hombres de Arden estaban ahí.
Probablemente, era una pequeña manada que vivía en esa zona.
Pero entonces Violeta analizó mejor y vio que algunos de esos hombres le eran familiares.
Los reconoció del palacio y de las calles del interior de la Manada Diamante.
También había algunas mujeres.
Nadie parecía haberse dado cuenta de que estaban por ahí.
Por supuesto, estaban escondidos detrás de los árboles y los arbustos, pero aun así, Violeta pensó que podrían percibir su presencia en cualquier momento.
Pero como no debían esperar ser atacados, todos parecían estar relajados y disfrutando.
Había mucha charla y risas.
Violeta vio a Lance apretando los puños a su lado.