Punto de vista de Dee
"Dee, cariño", la voz de papá se tensa por la llamada por cobrar.
Hay silencio en su extremo de la línea. Desde la entrevista la gente le ha dado espacio. Los reclusos no saben qué hacer con él. ¿Es un hombre tan alejado de la realidad gracias a su psicosis que se cree inocente, o en realidad atraparon al hombre equivocado y ese hijo de puta enfermo sigue ahí afuera? Hay mucho que desempacar aquí.
“Yo, eh… recibí una llamada de un abogado hoy. Uno realmente bueno. Un traje entallado y un Tissot en la muñeca. Creo que sus gemelos podrían haber tenido diamantes reales. Como, fóllame…”
"Oh, bien, vino". Solté un suspiro de alivio, otra promesa de que Wes se cumpliría.