*Vicky*
Los hombres llegaban interminablemente desde todos los contenedores y muelles, formando lo que parecía ser un océano interminable de personas. A pesar de eso, disfruté la emoción de matar. No sabía cuánto tiempo había pasado desde la última vez que tuve ese sentimiento.
Sin embargo, la multitud no seguiría siendo multitud por mucho tiempo. Después de matar a algunas personas y crear una abertura, volé hacia la ventana y usé los ecos de las armas para que los murciélagos exploradores encontraran a los francotiradores que estaban escondidos y disparándome. Aparecí frente a ellos en un instante, y ellos, que habían pensado que estaban en un lugar seguro, me miraron sorprendidos mientras corría hacia ellos. La última escena que vieron fue a mí agitando First Snow para cortarles la cabeza.
